Barcelona sólo podrá aumentar en 11.705 sus plazas de alojamientos turísticos, con lo que podrá llegar a las 153.758, un 8% más de las que tiene (142.053). Además, las nuevas camas deberán situarse en las zonas más periféricas o en las que están en desarrollo.

Así lo regula el plan especial urbanístico de alojamientos turísticos (PEUAT) que aprobó ayer inicialmente el Ajuntament y que, según informó la teniente de alcalde de Ecologia, Urbanisme i Mobilitat, Janet Sanz, podrá revisarse cada cuatro años.

El PEUAT, que pretende reducir el impacto del turismo, contempla que las áreas más alejadas del centro –Sant Andreu y partes de Sants, Les Corts, Sarrià, Gràcia, Horta, Nou Barris y Sant Martí–, donde no hay saturación, puedan ganar 4.025 plazas turísticas. En cuanto a las zonas en desarrollo –La Marina del Prat Vermell, La Sagrera y el 22@–, podrán sumar 7.680 más.

En el centro –Ciutat Vella,  el Poble Sec, la Vila de Gràcia y partes del Eixample y Sant Antoni– no se permitirá la apertura de alojamientos turísticos ni cuando alguno cese su actividad, con lo que se prevé que irán decreciendo. Se trata de la zona con más concentración, con el 50% de las plazas hoteleras, el 60% de las de albergues y el 80% de las de hostales.

En la corona que rodea el centro –la zona alta de Gràcia y partes del Eixample, Sants, Les Corts, Sant Gervasi, el Guinardó y Sant Martí–, cuando se dé de baja un establecimiento se podrá abrir otro con el mismo número de plazas, para mantener la oferta existente.

El plan también prevé que en el conjunto de la ciudad las camas turísticas se sitúen en edificios de uso turístico exclusivo, que no sustituyan viviendas y que estén en calles de un mínimo de 8 metros de ancho.

En cuanto a los pisos turísticos, se mantendrá el número y cuando cierre uno en una zona congestionada se podrá abrir

De los 38 nuevos alojamientos turísticos previstos que se vieron afectados por la suspensión de licencias que se puso en marcha en julio de 2015 para elaborar el PEUAT y que durará un año, 29 no se podrán hacer porque se iban a situar en las zonas donde el número de establecimientos no podrá aumentar.

El resto, nueve, se podrán construir si cumplen todas las condiciones que establezca el PEUAT una vez se apruebe definitivamente. A partir del 14 de marzo, el plan se someterá a exposición pública tres meses.