Debe de ser (y lo es, lo dice sin pudor, quizá porque la relación es buena) una pesadez que tras tu nombre siempre vaya el: hijo de, pero en nuestro país, como dice Rodrigo Mercado, es parte del mapa.

Tras diez años en una banda y cinco en solitario publica su segundo álbum, El fondo de la chistera, con el que igual logra la meta, en la que no parece tampoco tener mucha fe: vivir de la música. Su trabajo: jardinero "para así poder dedicar el resto del tiempo a lo que de verdad me gusta".

La canción estrella del disco de este joven (ya no tan joven, es del 78) que nos atiende con una timidez que no trata de disimular, da comienzo a la entrevista Creo en ti.

¿En qué cree usted?

La canción Creo en ti es para mi mujer. Esas personas que nos sacan adelante. En mi caso es ella.

¿Y en qué no cree?

En las cosas que se hacen sin trasfondo. No creo en el plástico, no entiendo que se pueda hacer música sin un sentimiento que la inspire.

Pero se hace...

En todo, llevamos una inercia chunga y la hemos comprado. Nos queda la pataleta y la mala leche.

Una inercia que nos hizo creer en la promesa (o certeza) de que tendríamos todo...

Yo ando en los treinta y pico y soy de esa generación que iba a tenerlo todo. Se nos educó en la felicidad, pero ¿en qué educas a un niño, en el mal rollo?

Pero el asunto 'happy'...

Eso no, pero te educan para que seas una buena persona , y ¿por qué hay tanta basura?

¿Por eso va tan unida la queja a su música? Y a la autocrítica...

Escribo por eso y para sacar la neura. No creo que se pueda hacer música sin víscera.

¿Como una mujer muy operada?

Sí, plástico. Esa música de plástico en la que no creo.

¿Con qué se queda con una operada o una sin operar?

Con una mujer sin operar.

También canta a las buenas costumbres, ¿la peor de todas?

La peor de las buenas costumbres es creer que está todo bien.

¿Y lo contrario?

Creer que todo está fatal todo el tiempo tampoco nos lleva a ningún lado, Algo tienes que hacer para solucionarlo. Al menos tu estado mental.

Canta también a un "algo que está llegando", pero ¿y si llega lo que merecemos?

Como concepto global no sé, de manera individual igual se salvaban unos cuantos.

Y esa ética con la que dice que tenemos una cita, ¿será la misma?

Habrá que evolucionar y sobre todo tenemos que aprender a ir con educación sin ir jodiendo por la espalda.

¿El peor titular con el que podría encontrarse?

Que el disco no dice nada.

Y la peor pregunta ¿tendría que ver con su padre?

Sí, es una pesadez. Es cansino y hay países en que no es tan grave lo de 'los hijos de'. Aquí no se valora, hay una gelatina densa que tienes que traspasar para que se valore lo que haces. Haga lo que haga soy hijo de.

¿Qué hay en esa chistera de la canción que titula el álbum?

Un sentimiento muy chungo. Es como decir: estoy en el fondo de una chistera porque hay cosas maravillosas que podrían salir pero no salen, y tendré que aprender magia para salir yo solo, sin ayuda.

Igual son las malas que nos salen las que nos llevan a las maravillosas, ¿o le suena a excusa?

Sí, no podemos salir felices las 24 horas. Lluego está en valorar en qué nivel calibra cada cual la felicidad. Para mí estar ahora contigo haciendo una entrevista está bien.

¿En qué se transformaría ahora mismo si tuviera chistera?

Tengo otro trabajo, de esto no vivo. Trabajo de jardinero desde hace mucho tiempo, porque me deja todas las tardes para ensayar. Llevo en solitario cinco años más diez con una banda y son muchos. Mi meta es vivir de la música, y ver que aprietas y no hay manera. Aún así, es mejor ser jardinero y poder hacer lo que de verdad quieres.

¿Quien la sigue la consigue?

Lo que está claro es que si no sigo no lo consigo.