Tenía 5 años cuando llegó a sus manos una diminuta máquina de coser con la que jugueteaba a ser costurera uniendo retales de colores. De tan lejos viene su pasión por la moda, pero no por "la locura en la que hoy se ha convertido la industria", sino la moda entendida como "proceso creativo y de confección".

Jéssica Romo, una catalana de 31 años criada en Málaga y afincada en Madrid, se ha montado el negocio online en su casa de Chamberí y hace ocho meses fue madre: dos quehaceres sin horarios que compagina gracias a las ganas, el talento y la juventud. DualD dress&design, su web para diseñar ropa a medida, nació a finales de 2013 al calor de una industria de la moda intransigente con la diversidad.

"La inspiración surgió en la calle, siempre que salía de compras con mi madre o mis amigas me daba cuenta de que las tiendas venden tendencias, lo que está de moda, y el mercado no siempre te ofrece lo que te gusta, te apetece o te sienta bien". Y sin embargo, la realidad es que cada persona tiene un tipo de cuerpo, unas medidas, unos gustos...

"Mi idea era ofrecer una alternativa real" a esta industria encorsetada e incluir al consumidor para que "protagonice todo el proceso creativo que rodea a una prenda y que es muy divertido". Su lucha también es ecológica. Ella batalla emulando la "antigua sastrería artesanal, pero con el componente innovador de las nuevas tecnologías", bajo el lema: "Menos, pero de más calidad y mejor hecho".

"Con este proyecto quería apostar por una nueva forma de consumir moda, alejada de la producción en masa que tanto stock y residuos genera", matiza. En su web, Jéssica vende una fabricación bajo pedido y ofrece la posibilidad de diseñar prendas únicas seleccionando entre más de 10.000 combinaciones diferentes, con tallas que van de la 34 a la 52. De momento trabaja solo con tejidos lisos, pero este año planea introducir los estampados.

El camino del emprendedor es largo, lo sabe porque no es su primer coqueteo con el mundo empresarial. En 2010 ya se lanzó a la aventura del mercado creando Almaravi.com, su propia marca de ropa, para la que diseña y confecciona moda exclusiva masculina y femenina. Un proyecto "ahora en standby, tanto porque estoy muy centrada en sacar adelante la nueva web como por la llegada de mi hija".

Su capital de inversión inicial llegó de sus ahorros y de familiares que creían en su idea. Esta joven se queja de la falta de ayudas públicas a quienes arrancan de cero un negocio. "De momento DualD no me da de comer, por eso también hago vestuario de teatro y diseño y confecciono vestidos de novia".

A pesar de ir paso a paso, Jéssica afirma estar contenta y las cifras están de su parte. En 2015, DualD fabricó 35 vestidos únicos. En la web se registraron 280 nuevos clientes, el sitio ha recibido más de 15.000 visitas (un 75% más de nuevos visitantes que en 2014), un 87% son mujeres, de ellas, el 40% tienen entre 25 y 30 años. Cuando los encargos empezaron a aumentar, Jéssica contrató a una modista de confianza para confeccionar los diseños. "Las prendas se entregan a domicilio en un plazo mínimo de diez días tras la venta".

De momento, su web ya ha sido seleccionada para formar parte de una incubadora de proyectos del Banco Santander para jóvenes emprendedores –Jéssica recibirá cinco meses de formación y asesoramiento y peleará por 60.000 euros en premios y un viaje a Silicon Valley–; y acaba de pasar la primera fase del concurso de la revista ELLE, Talent Project, donde la propuesta más innovadora recibirá un premio de 25.000 euros y una beca.