El 83% de las autorizaciones de residencia concedidas hasta octubre de 2015 a través de la Ley de Emprendedores están vinculadas a la entrada de profesionales altamente cualificados, investigadores o emprendedores, lo que supone la importación de talento a la economía española.

Según datos del Ministerio de Economía, los visados emitidos a profesionales altamente cualificados han sumado 2.572 desde octubre de 2013 hasta la misma fecha de 2015, y han supuesto el 39% del total de las autorizaciones, mientras que los concedidos por traslado intraempresarial fueron 1.815 y representaron el 27,6%. Hay que sumar las relativas a la entrada de investigadores y trabajadores que vienen a formarse a España y las emitidas a emprendedores, que ascendieron a 872 visados y 165, respectivamente, el 13,3% y el 2,5% del total.

Economía estima la inversión por la concesión de este tipo de autorizaciones en 376,57 millones de euros, mientras que podrían generar unos 10.199 puestos de trabajo. Los últimos datos señalan que se han emitido hasta el mes pasado 12.915 autorizaciones, 6.565 a trabajadores cualificados, estudiantes y profesionales, y 6.350 a sus familiares.

Las concesiones a inversores extranjeros fueron 1.141, el 17,4% del total, y según el ministerio, la recuperación económica está propiciando un alza en este tipo de visados. Este tipo de visados concedidos a extranjeros por la compra de inmuebles superiores a 500.000 euros representa, no obstante, el mayor nivel inversor hasta octubre de 2015, al sumar 820,29 millones de euros.

Aún con todo, rusos y chinos siguen liderando el mercado y las mismas fuentes de Economía explican que los primeros representan el 34 % del total y los segundos el 30%. En 2014, ciudadanos rusos invirtieron una media de 880.000 euros, mientras que el montante procedente de ciudadanos chinos fue de 645.000 euros.

La Ley de apoyo a los emprendedores y su internacionalización fue modificada en julio de este año para extender el beneficio de los visados a los familiares ascendientes, hijos mayores de edad y parejas de hecho, e introducir la posibilidad de solicitar el visado con inversión en vivienda mediante un contrato de arras. Además, la concesión de visado de inversor habilita para residir y trabajar, mientras que las renovaciones por residencia se amplían a cinco años.

La concesión de autorizaciones está vinculada a la inversión en deuda pública española por un mínimo de 2 millones de euros y a la compra de acciones o participaciones en empresas así como a la apertura de depósitos bancarios por un valor mínimo de 1 millón de euros. Un nuevo criterio desde hace cinco meses es la inversión en depósitos cerrados, fondos de inversión y fondos de capital riesgo.