José C.R., el padre que ha permanecido durante 63 días en huelga de hambre para reclamar un monitor de educación especial en un centro educativo de Carmona (Sevilla) para su hijo discapacitado, que precisa de atención a tiempo completo, ha dado por finalizada esta protesta por motivos de salud.

"Estaba ya muy mal, y ante la petición de mi familia he decidido parar", ha precisado a Europa Press el propio José, que ha querido dejar claro que, aunque renuncia a la huelga de hambre, volver de nuevo a la ingesta normalizada de alimentos le dará "fuerzas" para seguir su "lucha" por otras vías.

De hecho, el padre asegura que su presencia a las puertas de la Delegación Territorial de Educación seguirá siendo constante "hasta que le den a mi hijo el derecho reconocido por los técnicos", y ha criticado las órdenes "verbales" tanto de "dejar desatendido al niño" en el centro escolar como de que los efectivos de seguridad de la Delegación "estén siempre acompañándome" cada vez que hace alguna gestión en la misma.

Tanto la Fiscalía de Menores como el Defensor del Menor ya le han comprometido a esta familia una mediación en el caso, ello sin perjuicio de que los colectivos sociales que apoyan su causa organicen nuevas medidas de protesta, como las manifestaciones ya llevadas a cabo por la barriada del Cerro del Águila hasta desembocar en la Delegación Territorial de Educación de Sevilla.

Hace poco, unas 125 personas participaron en el llamamiento realizado por José para apoyar su lucha con la presentación de escritos en la Delegación de Educación. A ello se unen las personas "que diariamente se paran a mostrar su solidaridad", así como la recogida de firmas en la plataforma 'change.org'. "Mi caso ha circulado por toda España y por países como Francia, Bosnia y casi toda Latinoamérica", ha explicado José C.R.

La versión de educación

Por su parte, Educación dio cuenta del traslado a la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Sevilla del expediente del alumno, cuyo caso fue expuesto en la reunión que el delegado de Educación, Francisco Díaz Morillo, mantuvo con la Fiscal jefe, María José Segarra, el día 29 de septiembre.

En este marco, subraya que esta administración educativa ha mostrado "en todo momento una actitud conciliadora y receptiva", que se ha materializado en varias reuniones mantenidas con el equipo docente, sindicatos, representantes de los progenitores, grupos políticos, parlamentarios y padre del menor, a quienes se ha suministrado "toda" la información técnica y administrativa disponible, al mismo tiempo que "no va a ceder ante presiones manifiestas que no estén fundadas en la normativa de aplicación y en los informes técnicos".

Desde la propia Delegación se ha afirmado anteriormente que el menor cuenta desde el inicio de curso con los recursos asistenciales y docentes "que requiere, teniendo en cuenta su dictamen", es decir, el documento que prescribe los recursos humanos y materiales que necesita, así como la modalidad de escolarización más adecuada al alumno, "que en este caso es la necesidad de atención asistencial puntual".

Añade que el menor presenta un proceso "normalizado" en todas las áreas de desarrollo y una competencia curricular correspondiente a la etapa que cursa. Además, ha señalado que la administración educativa ha iniciado el seguimiento, como en el resto de alumnado de necesidades específicas de apoyo educativo escolarizado en primero de Educación Primaria, de cuantas medidas, en este caso asistenciales, se precisen al ser este caso una modalidad de escolarización que "no requiere recursos docentes especializados".

De este modo, añade que el alumno se encuentra escolarizado en el centro de la localidad elegido por sus padres y la asignación de recursos y horarios es "adecuada a la necesidad de asistencia que el menor necesita para su correcta escolarización".