El Govern ha destacado este jueves la necesidad de implantar el impusesto turístico y ha anunciado que reinvertirá los fondos recaudados en mejorar las zonas turísticas, preservar el medio ambiente, recuperar el patrimonio histórico y cultural y para innovación.

Así lo ha destacado el vicepresidente del Govern, Biel Barceló, quien ha comparecido ante la Comisión de Turismo del Parlament para presentar el programa de actuación de la Conselleria en materia de turismo, y ha declarado que apuesta "decididamente por un turismo sostenible y de calidad como palanca de progreso de un país moderno, justo e innovador".

Así, ha remarcado la "necesidad de implantar el nuevo impuesto turístico" para luego reinvertir esos fondos en la mejora del producto turístico. Asimismo, ha expresado que "el impuesto turístico parte de la idea de que los visitantes colaboren en el mantenimiento de las infraestructuras" de las islas. "Es una filosofía que se ha extendido en Europa", ha añadido.

Asimismo, Barceló ha señalado algunos problemas de la economía de las Islas Baleares, como "la excesiva dependencia global del turismo de masas y los efectos negativos derivados de la congestión y la saturación", o el hecho de que "los beneficios de la actividad económica quedan en pocas manos, y no se genera una prosperidad compartida".

Redefinir el modelo

Ante esta situación, el vicepresidente se ha marcado como objetivo redefinir el modelo económico en general y el turístico en particular, para poder materializar un proyecto estratégico, orientado a convertir "las Baleares, como islas europeas sostenibles".

"El objetivo central de este Govern es conseguir que las Islas Baleares sean sostenibles desde el punto de vista medioambiental, económico y social", ha remarcado Barceló.

El vicepresidente también propone alargar la temporada y mejorar la calidad del producto turístico como principales objetivos en materia turística. "El actual Govern está absolutamente comprometido en la tarea de mejorar la calidad de nuestro producto turístico", y en este sentido ha mostrado su voluntad de "situar Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera como los mejores destinos turísticos de Europa".