La actriz Lindsay Lohan, comocida en Estados Unidos como "la reina de las comedias adolescentes", había esnifado cocaína y tenía en su cuerpo el doble del nivel de alcohol permitido cuando fue detenida el pasado 26 de mayo, tras sufrir un accidente automovilístico en Beverly Hills (California).

Un día después del accidente, la actriz, de 20 años, fue fotografiada desmayada, mientras un equipo de colaboradores la ayudaba cuando salía de otra fiesta. El accidente, en el que no sufrió heridas graves, ocurrió cuando la actriz chocó contra un bordillo y se golpeó contra un árbol.

En el momento de su detención, la policía indicó que habían descubierto en el interior del vehículo una sustancia que podría ser cocaína.

La información ha sido desvelada hoy por la página de internet "tmz.com" , y recuerda que Lohan tiene previsto comparecer ante el juez el próximo 24 de agosto, con lo cual se podría unir a la lista de famosas condenadas por este mismo delito.

Tras estos incidentes, Lindsay, que fue "la niña mimada" de la factoría Disney, ingresó el pasado 28 de mayo en el centro de rehabilitación Promises, de Malibú (California).

El pasado lunes, la madre de la actriz, Dina Lohan, aseguró que habla todos los días con Lindsay y reveló que su hija "está fenomenal" desde que sigue la rehabilitación, y que ampliará su tratamiento para que la enseñen a integrarse en su vida habitual, tras los cuidados recibidos.

En concreto, se trata de un "programa de convalecencia", según la página web del centro, la gente "realiza la transición del ingreso a su comunidad" e incluye terapia de grupo y un plan de doce pasos.

Por otra parte, Dina espera que el próximo 2 de julio, día del 21 cumpleaños de su hija, ella y su familia puedan celebrarlo en familia.

Lohan es portada habitual de las revistas del corazón estadounidenses, en las que aparece con frecuencia retratada a la salida de clubes y salas de fiesta nocturnas.

La actriz también ha recibido a lo largo de su carrera numerosas alabanzas como profesional, en especial del fallecido director Robert Altman, y de la actriz Meryl Streep, con los que trabajó en uno de sus últimos estrenos, "A Prairie Home Companion".