Mejor te lo pago en yenes

Multidivisa: Este tipo de hipoteca, referida a una moneda extranjera, puede ser muy rentable, aunque tiene algunos riesgos.
El incremento de los precios de la vivienda hizo que muchos se lo pensaran dos veces antes de comprarse una casa.
El incremento de los precios de la vivienda hizo que muchos se lo pensaran dos veces antes de comprarse una casa.
El incremento de los precios de la vivienda hizo que muchos se lo pensaran dos veces antes de comprarse una casa.

El incremento de los precios de la vivienda hizo que muchos se lo pensaran dos veces antes de comprarse una casa.

Ahora, la tendencia alcista de los tipos de interés está haciendo que algunos se arrepientan de haberlo hecho. Para atenuar los efectos de estas subidas, las entidades bancarias empiezan a comercializar las hipotecas multidivisa, una opción exótica, pero que puede resultar muy rentable.

Desde hace año y medio, el Banco Central Europeo ha encadenado siete subidas consecutivas de tipos, lo que ha llevado al euríbor a alcanzar su nivel más alto desde el año 2001. A la vista de estos datos, no parece descabellada la posibilidad que ofrecen los bancos: contratar la hipoteca en una o varias monedas extranjeras. Esto permite aprovechar los bajos tipos de interés que existan en sus mercados, así como la debilidad del tipo de cambio de la divisa en cuestión con respecto al euro.

Además del tipo de interés, el cliente tendrá que hacer frente a las comisiones de cambio de divisa, que suelen oscilar entre el 0,3 y el 0,5%, dependiendo de la entidad bancaria. Sin embargo, a la hora de contratar un producto de estas características también hay que valorar los riesgos que puede suponer, ya que una vez contratado no es posible cambiar la divisa elegida por otra distinta.

Una apuesta arriesgada

Estas hipotecas presentan el riesgo de que se produzcan cambios de tendencia en el mercado que puedan revalorizar la moneda –con lo que se tendrían que pagar más euros por la misma cantidad– o que los tipos de interés de esa economía empiecen a subir, tal y como ha ocurrido en la zona euro.

Para evitar sorpresas desagradables, los expertos aconsejan a los usuarios que vinculen su préstamo a varias monedas, para dividir el riesgo entre todas ellas; que no hagan hipotecas a plazos de más de quince años, para reducir la incertidumbre, y que se dejen aconsejar por un asesor hipotecario.

Muy rentables... o un poco menos

Yen japonés: Los tipos de interés en Japón están en el 0,5%, frente al 4,36% de la zona euro. El yen se ha devaluado hasta los 164 por los que se cambia un euro.

Franco suizo: El precio del dinero se sitúa en Suiza en torno al 2%. La moneda comunitaria se cambia a 1,65 francos, que tiene una tendencia al alza.

Dólar americano: Aunque el cambio favorece al euro (1,35 dólares), ahora no conviene contratar una hipoteca en esta moneda, ya que sus tipos están por encima del 5%.

Libra esterlina: Aquí todos los factores son negativos: tipos de interés superiores al 5% y una moneda fuerte.

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