El alcalde de Lleida, Àngel Ros, ha pedido a la Generalitat que haga política industrial y que ayude a la planta de Ros Roca Indox que prevé despedir a 186 trabajadores de sus plantas en Tàrrega, Anglesola (Lleida) y Sant Just Desvern (Barcelona).
Tras participar en una manifestación en Tàrrega contra los despidos de la compañía, Ros ha reclamado al Gobierno catalán que mueva ficha en este conflicto laboral que "dejará a 180 personas sin trabajo".
Medio millar de personas han participado en la marcha, a la que han acudido el secretario general de UGT en Catalunya, Josep Álvarez; el de CC.OO. en Catalunya, Joan Carles Gallego, y las alcaldesas de Tàrrega, Rosa Maria Perelló, y de Anglesola, Rosa Maria Mora, entre otros.
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