Un total de 7.846 personas se ha beneficiado a lo largo del pasado año del Programa Operativo de Lucha contra la Discriminación en Castilla y León, que cuenta con la cofinanciación del Fondo Social Europeo (FSE), gracias al cual 3.524 personas consiguieron un contrato laboral y 3.065 recibieron cursos de formación.

Así lo han dado a conocer las entidades sociales gestoras del Programa desde hace 15 años, el cual tiene como objetivo promover la inserción social y laboral de las personas en situación o riesgo de exclusión social (personas inmigrantes, personas con discapacidad y población gitana). Concretamente se encargan de su gestión Cáritas Española, Cruz Roja Española, Fundación ONCE-FSC Inserta y Fundación Secretariado Gitano.

A lo largo del pasado ejercicio, en el que se destinaron a este programa 3,92 millones de euros, se beneficiaron 7.846 personas (3.852 de ellas nuevas), de las que 4.434 eran mujeres (el 56,5 por ciento) y 2.700 jóvenes (34,41 por ciento). Sin embargo, las cifras de hombres y mujeres se han ido igualando en los últimos años.

Por lo que se refiere al empleo, del total de personas atendidas 2.511 consiguieron empleo, el 32 por ciento frente al 27 por ciento del año anterior, y se formalizaron 3.524 contratos, 447 indefinidos (el 13 por ciento de ellos) y superiores a seis meses 1.078 —el resto fueron por obra y servicio—.

Por sectores, el mayor número de empleos se encontró en el sector servicios, seguido de servicios personales (atención a mayores o a la infancia), hostelería, sector doméstico e industria (fundamentalmente alimentaria).

En cuanto a la formación, a lo largo del pasado año se impartieron 504 cursos, con un total de 98.000 horas, en los que se han formado 3.065 personas —el 57,5 por ciento, 1.764, mujeres— en materias como limpieza, atención en punto de venta, vendedor de estación de servicio, manipulador de alimentos, operador de restaurante-bar y catering, jardinería, nuevas tecnologías y talleres de habilidades sociales.

Además, en el marco del programa se han creado 19 empresas, ya que se trata de detectar a las personas emprendedoras, de diferentes ramos como tiendas de ropa, zapatos, bolsos y complementos, bisutería, bar, etcétera. Para ello, se ha contado con la participación de 454 voluntarios y 98 profesionales contratados, profesionales y técnicos.

Trabajo frente a la exclusión

El programa persigue atender a las personas en situación de desventaja o discriminación social para lo que se trata de lograr su inclusión en el mercado laboral, contribuir a la igualdad de oportunidades y proporcionar apoyo a estas personas en alguna otra carencia como escolarización, vivienda o apoyos familiares, ha explicado la directora territorial de la Fundación Secretariado Gitano, Mar Fresno.

Por su parte, la directora territorial de FSC Inserta, Begoña Grijalvo, ha destacado la importancia de los datos del año 2014 porque demuestran que sí se puede luchar contra la exclusión y aunque parezca un objetivo utópico se puede prevenir y solucionar con las medidas adecuadas.

Sin embargo, las entidades que se encargan de la gestión han incidido en que en época de bonanza las personas salían y entraban, pero tenían cierta facilidad para encontrar un trabajo y ahora, con la crisis económica, esas personas son las primeras que han vuelto, ya que tienen una formación precaria y necesidad de apoyos.

En este contexto, la coordinadora de Cáritas en Castilla y León, María Jesús Díez Guerrero, ha destacado la importancia del trabajo de los voluntarios y los profesionales que han participado en 2014 en estas acciones formativas y orientadas al empleo, pero también de "contención" ante la desesperación y el desánimo que provocan estas situaciones.

De la misma forma, ha resaltado el papel de las empresas, ya que cada vez se firman más convenios de colaboración que permiten la realización de prácticas o experimentar fórmulas de inserción, en la mayoría de las ocasiones con éxito, algo que redunda en sus programas de responsabilidad social corporativa.

En este ámbito, la coordinadora de Cruz Roja Española, Eva Fernández, ha destacado los equipos "superespecializados" para estos fines.

Éste es el último año que las cuatro entidades gestionan este programa, que el próximo ejercicio pasará a denominarse Programa Operativo de Intervención Social y Exclusión Social. Para ello, el Gobierno ha consultado con las entidades para elaborar el nuevo marco de trabajo, aunque aún no conocen la respuesta de Bruselas para continuar con la gestión del programa, aunque confían en tener cabida las cuatro entidades.

Por otra parte, la coordinadora de Cruz Roja ha adelantado que el próximo 16 de marzo se desarrollará una jornada, en el salón de actos del Consejo Económico y Social, en la que se hablará sobre jóvenes y empleo. Bajo el título 'Una oportunidad para la inserción de jóvenes en desventaja', se intentará acercar al nuevo marco el programa operativo de empleo juvenil.

Se tratará de abordar el papel de los agentes que tienen que ver con el programa, mostrar la aportación como entidades sociales y compartir "buenas prácticas", para lo que asistirán las administraciones relacionadas con empleo y juventud.