"Estamos en un momento muy bueno, una época de mucha confianza. Igual que otras veces íbamos perdiendo y sabíamos que estaba muy complicado remontar porque los nervios nos atenazaban, a día de hoy tenemos fe. Nos hemos creído que somos un equipazo y podemos lograr la Liga. Esperamos que en las tres últimas jornadas sigamos igual".

La felicidad de remontar el empate en Huelva en el tiempo descuento se entremezcló con la bronca que, contó Casillas, les echó Fabio Capello por dejarse empatar un partido encarrilado.

"El mister nos ha dado la enhorabuena por ganar, pero está claro que ha habido tirón de orejas por lo que pasó. Con un 0-2 ganando nos complicamos la vida y tocó hacer una nueva proeza para lograr tres puntos importantes. Espero que sirva para afrontar los próximos partidos de otra manera", admitió.

Aunque Casillas reconoció que con el empate se les pasaron a todos "muchas cosas por la cabeza", afirmó que "ganando así se saborea mucho más".

Ante las afirmaciones hechas desde Barcelona y Sevilla referentes a la suerte del Real Madrid, el portero madrileño recordó que si son líderes es porque aprovecharon los fallos de sus contrincantes.

"Ellos juegan un fútbol muy bueno pero nosotros estamos en una posición privilegiada, cuando hace tres meses estábamos a ocho puntos. Somos líderes por méritos propios porque aprovechamos las oportunidades que nos dieron. Así que, más allá de los árbitros y la suerte, dependemos de nosotros mismos para ganar la Liga", argumentó.

Y pidió respeto para el Real Madrid. "En la Liga prima la regularidad. Si fuese un campeonato a siete partidos sería diferente. Para mí fue triste que Italia ganase el Mundial por cómo jugó, pero en 35 jornadas el más regular es el Real Madrid y hay que darle el respeto que se merece", dijo.

Casillas admitió que ve bien las primas por ganar aunque está convencido de que los rivales que tiene el Barcelona hasta el final del campeonato, que no se juegan nada, lucharán por la victoria.

"Los jugadores de fútbol son profesionales y siempre quieren honrar su camiseta y su nombre. Nadie se va a dejar perder por maletines. Cada jugador, como hizo el Espanyol en el Bernabéu, intenta ganar siempre aunque no se juegue nada. Si el dinero es para ganar, bienvenido sea, mientras no sea para perder", afirmó.

Por último, pidió diálogo para que se solucione el problema que vive el arbitraje español, que como medida de protesta no está detallando las cartulinas amarillas y no se produce sanción por parte de los comités.

"No es bueno que a estas alturas de campeonato haya ese tipo de cosas. Cada uno mira por lo suyo pero no debe repercutir en los demás. Con el diálogo debe solucionarse. No hay que buscar sancionarles sino arreglarlo hablando", concluyó.