Un acuerdo que va más allá del anteproyecto de la Conselleria, que sólo contempla el soterramiento de 550 metros y el resto serían las rampas o bajantes por las que discurriría el tren hasta estar soterrado, «por lo que la pedanía seguiría estando dividida», explicó ayer el portavoz socialista, Rafa Rubio.

 

Con lo acordado, toda la pedanía quedaría libre de
vías, y las rampas se situarían en los términos municipales de Burjassot y Paterna, «pero en zonas que no son urbanas y que, de momento, no se van a recalificar», aseguró la concejala de Esquerra Unida Mavi González.

 

El soterramiento de las vías de Benimàmet es una reivindicación histórica de los vecinos de la zona. Además de dividir en dos la pedanía, las vías son una trampa mortal, pues en los últimos cuatro años tres personas han fallecido atropelladas por el tren. El último caso se produjo el pasado 25 de febrero cuando un coche se saltó la barrera y fue arrollado.

 

Ayuntamiento y Consell  firmaron en enero un convenio para soterrar las vías, proyecto que debería estar finalizado para 2007.