El Parlamento catalán ha aprobado este jueves la creación de una comisión de investigación sobre la existencia de cuentas bancarias en paraísos fiscales a nombre de cargos o excargos públicos de la Generalitat, su enriquecimiento ilícito y el cobro de comisiones ilegales. Como estaba previsto, la propuesta presentada por ERC, ICV-EUiA y la CUP ha sido aprobada por unanimidad con el apoyo de PSC, PPC y C's —estos dos últimos registraron su propia solicitud, que ha sido rechazada—. Los diputados de CiU también han votado a favor.

La comisión, que no tiene fecha de creación —en las próximas semanas se elegirán sus miembros y su presidente—, fue solicitada después de que el expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, confesara que su familia tuvo dinero oculto en el extranjero durante 34 años. Sin embargo, en el debate se han citado otros muchos casos, como las causas en las que están imputados los hijos y la esposa de Pujol, así como algunas en las que se investiga a familiares y amigos de consejeros y exconsejeros.

También se ha hecho referencia al supuesto cobro de comisiones por la adjudicación de obra pública por el que CDC tiene la sede embargada o la financiación ilegal por la que fue condenada UDC. "Un 5% de la obra pública durante 20 años es una auténtica barbaridad", ha exclamado el presidente de C's, Albert Rivera, quien quiere saber si "el Palau de la Música fue una lavadora de dinero de los gobiernos de CiU". También ha reclamado que los corruptos no sólo sean castigados sino que devuelvan el dinero.

En la misma línea se ha manifestado el popular Santi Rodríguez, quien ha dejado claro que su partido quiere explicaciones sobre el patrimonio de los Pujol y sobre si sus prácticas irregulares se extendieron a CDC y a la Generalitat: "Queremos saber si este es un caso de corrupción y evasión de una familia o de la gran familia de CDC". Gemma Calvet (ERC) ha exigido al PP que no dé lecciones sobre transparencia política porque hay "demasiados casos" de corrupción que afectan a los populares, y ha planteado que los comparecientes vayan a la comisión de forma voluntaria, aunque no ha dado nombres.

Mercè Jou, diputada de CiU, ha criticado el uso partidista de algunos grupos, como el PP porque a nivel ha vetado cuatro veces la creación de comisiones de investigación sobre el 'caso Bárcenas' y el fraude fiscal, o el PSC, pues los socialistas de Andalucía también han impedido la investigación parlamentaria del 'caso de los ERE'. Sin embargo, ha asegurado no tener "ningún inconveniente" para que se aclaren todos los casos y ha agregado que son "los primeros interesados en que no se produzcan más". Por eso, han apoyado la creación de la comisión, para que puedan surgir "iniciativas legislativas" que ayuden a combatir la corrupción.

En cualquier caso, la oposición ha coincidido en expresar su rechazo a la actitud que mostró Pujol cuando compareció ante la Cámara el viernes, ya que consideran que les abroncó y no dio "respuestas" sobre su patrimonio oculto. El diputado del PSC Jordi Terrades ha censurado que el expresidente mostró una actitud "intolerable" ante los diputados, además de no explicar el origen de la fortuna que, según destacan los socialistas, sonríe a la familia Pujol al completo. También Marc Vidal (ICV-EUiA) ha lamentado que la intervención de Pujol generó más dudas de las que aclaró, y ha pedido que la comisión aclare si "el clan familiar y las amistades de Pujol tuvieron una relación privilegiada con la Generalitat para hacer negocios".

Los diputados han coincidido en destacar el daño que hace la corrupción en la política, especialmente en época de crisis, pues le resta credibilidad y la aleja de los ciudadanos. Por eso, la comisión tiene por objetivo evaluar e investigar, en el contexto del 'caso Pujol', las distintas modalidades de fraude y evasión fiscal, determinar las prácticas de corrupción en contextos de contratación y concertación público-privada y depurar responsabilidades políticas e institucionales de las últimas décadas.

El líder de la CUP en la Cámara, David Fernández, quiere que se investigue si el fraude fiscal ha sido "un patrón de conducta de las élites del país", por lo que ha sido el único partido que ha apuntado algunos de los nombres que piensa citar. Así, quiere que den explicaciones en el Parlament los "Carulla, Sumarroca y Carceller", entre otros, además del jugador del FC Barcelona Lionel Messi, al que la justicia investiga por un presunto fraude a Hacienda. La CUP calcula que el fraude fiscal en Cataluña asciende a 16.000 millones anuales, cuatro veces más que los recortes que se han hecho en los últimos años.