Un hombre que vendió a su hijo recién nacido para comprar billetes delotería ha sido condenado a diez años de cárcel por un tribunal en laprovincia china central de Henan.

El padre vendió a su bebé varón por 9.000 yuanes (1.100 dólaresestadounidenses, 900 euros) porque tenía "sueños de hacerse rico degolpe". El condenado, además de pasar 10 años en la cárcel, deberápagar 5.000 yuanes de multa (600 dólares, 470 euros).

El hombre, que tiene otro hijo, había pasado 5 años en prisión con anterioridad por un delito de robo.

El Gobierno chino reconoce que miles de niños (sobre todo varones) sonrobados y vendidos cada año, y posteriormente re-vendidos a familiascon problemas de fertilidad o aquellos que desean tener más de unpequeño y no se atreven por la política del hijo único.

En varias ocasiones, la policía ha logrado desarticular bandas delcrimen organizado dedicadas a la compraventa de niños y mujeres(también para matrimonio), lo que es castigado con pena de muerte enChina.