El zoo de Berlín se niega a dejar morir al pequeño Knut

  • Fue abandonado por su madre y un cuidador del parque le adoptó como a un hijo.
  • Defensores de los derechos de los animales piden que se le sacrifique porque se le está humanizando demasiado.
El pequeño Knut (Handout / Reuters)
El pequeño Knut (Handout / Reuters)
Reuters
El pequeño Knut (Handout / Reuters)

El zoológico de Berlín ha tomado cartas en el asunto para evitar que al pequeño Knut, un oso polar de tres meses, se le deje morir.

Tras ver morir a su hermano gemelo y ser rechazado por su madre, Tosca, el cachorro fue adoptado por un cuidador del parque llamado Thomas Doerflein, quien no escatima en mimos al cuidar al animal.

Su 'padre adoptivo' se trasladó a vivir dentro del zoo para estar cerca de Knut, le da el biberón y le lava como si fuese un bebé. Incluso le toca canciones de Elvis con la guitarra y le hace regalos por Navidad, según los periódicos alemanes.

No es apropiado y es una violación seria de los derechos de los animales
Algunos defensores de los derechos de los animales consideran que esto humanizará demasiado al oso y quieren que el parque ponga fin al asunto porque, a su jucio, no es justo para él no poder vivir como un oso polar y depender siempre del cuidado humano.

“No es apropiado y es una violación seria de los derechos de los animales; de hecho, debía haber sido sacrificado”, asegura el ecologista Fran Albretch al diario alemán Bild.

Sin embargo, los responsables del zoológico no piensan cambiar de opinión y consideran que esta petición es un "completo sinsentido".

Y es que Knut ya se ha hecho un hueco en el corazón de los berlineses. El osito se ha convertido en un especie de símbolo para la ciudad e incluso la fotógrafa Annie Leibovitze ha escogido su imagen para formar parte de una nueva campaña para el cambio climático.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento