La Guardia Civil detuvo en la N-1, en las proximidades de la capital burgalesa, a un hombre con iniciales C.G.P, de 50 años, como supuesto autor de un delito contra la seguridad vial, al conducir un vehículo a motor con una tasa de alcoholemia superior a la permitida con el que sufrió dos accidentes de circulación, con la particularidad de que se ausentó del primero sin facilitar los datos.

En la tarde del martes, 6 de mayo, el vehículo que conducía el detenido se salió de la vía al tratar de rebasar una rotonda, ya que siguió una trayectoria rectilínea y chocó seguidamente contra una barrera metálica de seguridad lateral. Varios fueron los vehículos que pararon para auxiliarle, por lo que las primeras llamadas a la Guardia Civil eran imprecisas, haciendo pensar en la existencia de un accidente múltiple.

A pesar de los desperfectos sufridos en el vehículo, con airbags desplegados por el impacto, continuó la marcha ausentándose del lugar sin facilitar los datos. Dos kilómetros más adelante provocó un segundo accidente de circulación al salirse de la vía y chocar de nuevo contra otra barrera metálica de seguridad lateral. En esta ocasión los daños sufridos impidieron que continuara la ruta.

Un Equipo de Atestados e Informes del Subsector de Tráfico, personado en el lugar para recabar información y determinar las causas de los accidentes, sometió al conductor a la prueba de alcoholemia, arrojando sendos resultados positivos de 1,42 y 1,50 mg/l, superando en seis veces la tasa legalmente permitida, por lo que fue detenido.

Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Burgos.