La Policía Nacional ha detenido en Melilla a cinco jóvenes de edades comprendidas entre 20 y 22 años "ocupando" una vivienda deshabitada con tres kilogramos de hachís distribuidos en 28 placas y 33 trozos, varias armas blancas, objetos contundentes y una ballesta, según ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior.

La intervención se ha desarrollado cuando un indicativo de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) acudió a atender la llamada a la Sala del 091 de un ciudadano anónimo, en la que se quejaba de que varios jóvenes estaban haciendo ruido y consumiendo hachís en la vía pública.

Los agentes se personaron en el lugar, una vivienda en ruinas y deshabitada sita en la calle Cádiz, encontrando a cinco jóvenes a los que interpelaron sobre lo que estaba sucediendo. A preguntas de los policías, explicaron que desconocían quién era el propietario de la casa, que eran los únicos que entraban y salían de este domicilio y que se reunían ahí para que no lo hicieran otras personas no residentes en el barrio.

El portavoz policial ha explicado que, una vez que los agentes entraron en la vivienda, "encontraron en el salón una navaja de tipo siete muelles de 23 centímetros de hoja, dos cuchillos de 23 y 13 centímetros de hoja, un machete tipo corta cañas con su funda, dos objetos contundentes de grandes dimensiones y una ballesta".

También observaron que había numerosos paquetes envueltos en película transparente, "conteniendo sustancia estupefaciente vegetal de color verde, presuntamente hachís, así como varios frascos con pastillas de medicamentos tranquilizantes de las marcas Trankimazin, Tiaprizal y Dogmatil".

Ante las evidencias halladas a simple vista, los policías procedieron a la detención de los cinco jóvenes como presuntos autores de un delito contra la salud pública, así como a la intervención de las armas y sustancias encontradas. Un pesaje y valoración posterior del hachís intervenido ha dado como resultado un total de 2.950 gramos, distribuidos en 28 placas rectangulares y 33 trozos.

Con posterioridad, a las 2,30 horas del 12 de abril, un indicativo de UPR acudió al mismo lugar para atender una llamada similar. En esta ocasión se encontraban cuatro jóvenes, dos mujeres de 27 y 19 años y dos varones de 22 y 20. Estos últimos habían sido detenidos en la intervención del día 24 de marzo en esta misma vivienda.

En el pertinente cacheo y registro de seguridad, a uno de los jóvenes se le intervino una bolsita conteniendo diez gramos de hachís.

El portavoz de la Jefatura ha subrayado que la Policía continúa realizando vigilancia sobre este domicilio y las personas que a él acuden, no descartándose posteriores detenciones.