La secretaria general de la Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT en Castilla y León, Carmen Ámez, ha afirmado que el sindicato valora la posibilidad de que se abone una cuantía lineal de 300 euros a cuenta de la paga extra devengada de 2012 y el resto, a quien le corresponda, en diciembre de este año.

Ámez, durante la presentación de la campaña 'La dignidad es el salario' para los empleados públicos, ha avanzado que este miércoles se celebrará una reunión a la que asistirán UGT, CCOO y CSI-F para abordar esta cuestión y la posible negociación con la Junta de Castilla y León.

La responsable de UGT, aunque cree que su propuesta "no convence", ha señalado que UGT valora como posible solución el pago de una cuantía lineal a todos los funcionarios, que podría ser de 300 euros y se podría abonar este mes.

Así, quien no viera satisfecha la cuantía que le corresponde por ser superior, cobraría el resto de la paga extra devengada —44 días— en diciembre de este año.

Antes de fin de año

Ámez ha añadido que en cualquier caso el sindicato tiene establecida como "línea roja" el abono de esta parte de la paga extra a lo largo de este año y ha rechazado la propuesta de la Junta de abonar ahora un 40 por ciento de la paga porque no cree que sea tan justo como dice la Administración, al haber trabajadores y salarios "muy, muy distintos".

En este contexto, la secretaria de FSP-UGT ha señalado que los sindicatos se reunirán este miércoles para ver posibles propuestas y tratar de negociar con la Junta, aunque ha señalado que no sabe "qué pensar" de la negociación.

"Se miente de forma irónica", ha señalado Carmen Ámez, quien ha criticado que ahora se diga que se quiere negociar porque la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, no quiere abonar todo el dinero de esta paga extra devengada porque no le dejan los consejeros y "ni siquiera" argumenta que no hay dinero suficiente.

La sindicalista ha añadido que no sabe lo que pasará en la negociación y ha afirmado que la Junta lo que tenía que hacer era esperar si no tiene dinero y no "repicar antes de saber si va a ir a la procesión o no".

A su juicio, la Junta está "cerrada en banda" y ha advertido de que "negociar con un pared" es muy difícil.