El número de trabajadores cántabros afectados por expedientes de regulación de empleo (EREs) ha descendido en enero y febrero de este año un 54% respecto a los dos primeros meses del pasado ejercicio, de modo que "no llega a 800" personas (794, en concreto), "el dato más bajo desde 2008".

Así lo ha destacado este jueves la consejera de Economía, Hacienda y Empleo del Gobierno regional, Cristina Mazas, quien ha subrayado igualmente que el número de EREs presentados ante la Dirección General de Trabajo en lo que llevamos de 2014 ha descendido un 46%, hasta los 88, es "el más bajo desde 2010", cuando hubo 65.

De este modo, se ha "invertido" la situación tras el incremento "muy grande" de los expedientes registrados (96 en 2011; 131 en 2012 y 165 en 2013), y que "se achacaron en su día a la reforma laboral", ha apostillado Mazas.

Lo ha dicho con motivo de la inauguración de la jornada 'Hacia un mercado laboral competitivo como motor de productividad', organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y Adecco, en el Paraninfo de la Universidad de Cantabria, donde ha manifestado que los empresarios no están usando los EREs para hacer más competitiva su empresa, de modo que el número de expedientes y de trabajadores afectados se ha rebajado "considerablemente".

De los 88 EREs presentados en lo que va de año, la mayoría eran de suspensión (61, que afectaban a 710 trabajadores), mientras que 24 eran de reducción (con 47 empleados afectados) y tres de extinción (que afectaron a 37 personas).

Paro y deuda

El "dato positivo" de los EREs se suma, ha añadido la consejera, al del paro registrado en lo que va de 2014, con dos meses consecutivos con una tasa interanual negativa, es decir, "con menos parados que el año pasado", algo importante ya que "Cantabria no tenía tasa interanual negativa desde el año 2007".

La consejera también se ha referido a la deuda y el déficit de la región. Tras recordar que con motivo de la ley de estabilidad presupuestaria aprobada en 2012 la deuda autorizada a las comunidades autónomas equivale al déficit permitido, ha señalado que en el presente año será del 1% del PIB, lo que equivaldrá a unos 140 millones de euros.

En cuanto a la deuda del pasado ejercicio, que creció un 7%, una de las más bajas del país, y que se tradujo en un incremento de 700 millones de euros, la consejera ha achacado el repunte a tres motivos: el déficit de 2012, fijado en el 1,5% del PIB y que equivalió a unos 196 ó 198 millones; las 'facturas en el cajón' que supusieron un desembolso de 326 millones; y, el reto, de la deuda procedente de la financiación estructurada.

Al hilo de lo anterior, ha reiterado que este año Cantabria va a pagar más de 380 millones en concepto de amortización de la deuda e intereses bancarios.

Después de señalar que el nivel marcado por Europa para las administraciones españolas de cara al endeudamiento es del 1% para este año y el próximo, la consejera ha indicado que a partir de entonces y hasta 2020 se irá reduciendo ese porcentaje, ya que se prevé que se estabilicen las cuentas y se genere superávit, parte del cual se destinará a seguir amortizando la deuda.

COMPETITIVIDAD

Por otro, la consejera de Economía considera que existen tres factores fundamentales para hacer de Cantabria una región competitiva. Se trata, como ha enumerado, de la flexibilización que aporta la reforma laboral, el apoyo a la puesta en marcha de nuevas empresas y las medidas a favor del impulso de una contratación indefinida "estable y de calidad".

Estos tres factores cuentan, como ha añadido, con el apoyo de las medidas adoptadas por el Gobierno de Cantabria para la puesta en marcha de nuevas empresas: reducción de las cargas burocráticas, incentivos para la inversión mediante la reducción de impuestos y las ayudas al establecimiento como autónomo, dotadas con 10 millones de euros anuales, ampliadas con la introducción en el decreto de una serie de "demandas históricas" del colectivo, como la no exigencia de inversión previa, asesoramiento para elaborar el plan de viabilidad y la eliminación de cargas burocráticas, alcanzando en la actualidad a 1.550 beneficiarios.

Mazas ha subrayado, además, la importancia de las ayudas puestas en marcha por su departamento de cara al fomento de la contratación indefinida, a través de la conversión de contratos de duración determinada o temporales en indefinidos, que "responde a una de las principales demandas de los empresarios en el campo de la reducción de los costes laborales y con una importante incidencia en la competitividad".

En este punto, ha indicado que gracias a estas ayudas, se pueden subvencionar con hasta 5.000 euros las cuotas a la Seguridad Social de trabajadores contratados con más posibilidades de inserción laboral, y con hasta 8.000 euros las de contrataciones de parados de larga duración, con más de 55 años y que pertenezca a Torrelavega, donde el paro se sitúa dos puntos por encima de la tasa de Cantabria.

JORNADA

La jornada sobre competitividad ha reunido a empresas, expertos e instituciones para la realización de un balance sobre la incidencia que ha tenido la reforma laboral en la toma de decisiones empresariales y el análisis de su trascendencia en la creación de empleo.

El acto, clausurado por el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha contado, además, con la presencia del presidente del Tribunal de Justicia de Cantabria, Cesar Tolosa; Ana Isabel Campos, consejera de APD en Cantabria y directora de Tecnisa Campos, y Ana Verano, directora regional Norte del Grupo Adecco, entre otros.