Victoria Beckham ha hablado para Vanity Fair, en su edición en España, en una entrevista reveladora donde comenta su afición a la moda hasta convertirse en diseñadora y, cómo no, ser una estrella del pop, pasando por el acoso escolar que sufrió de pequeña.

Victoria Beckham también ha sufrido este lastre en las aulas como es el acoso escolar: "No acababa de encajar. Después del colegio iba a clases de ballet, luego pasé al claqué y a continuación a la danza moderna, y terminé yendo a lecciones de interpretación y canto, mientras que el resto de alumnos hacían novillos o se escondían para fumar y cosas de esas. A eso se dedicaban los que molaban, y yo no era como ellos".

Con esas disciplinas que adquirió, fue lo que pudo servirle como perfecto trampolín para ser una de las elegidas como Spice Girl. Muchas chicas querían ser como ellas, pero Victoria Beckham pudo conseguirlo. Si no hubiese tenido esta dedicación al trabajo, a día de hoy no podríamos hablar de Victoria tal y como lo es ahora.

Y es que según recoge Vanity Fair en propias palabras de la esposa de David Beckham, las audiciones para encontrar a las Spice Girls se anunciaban en un periódico: "Cuando estaba en la universidad y estudiaba en el Laine Theatre Arts, compraba el periódico Stage. Un día vi un anuncio de las Spice Girls, aunque creo que el nombre en sí no aparecía. Se hablaba de un conjunto musical y me presenté a las audiciones".

Tras varias pruebas, finalmente se consiguió reunir a las Spice Girls, un grupo de chicas que, según Victoria, compartían algo más que su afición a la música: "Todas habíamos sido... no marginadas, pero tampoco habíamos sido de las que más destacaban". Por otro lado se ahonda en el curioso nombre del grupo.

Victoria cuenta que fue idea de un periodista de "la revista Smash Hits". Para dicho periodista a "cada una de ellas le recordaba a una especia y les asignó un nombre". Asegura que fue algo "espontáneo".  Afirma que le encantaba el grupo porque era una manera de "ensalzar a la figura de la mujer" destacando que cada una de ellas era diferente y que eso no es para nada malo. "Las mujeres y las chicas deberían estar unidas y apoyarse", añade.

Sin embargo, esta época dorada ha acabado para ella, ya que después de la clausura de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012, fue el momento perfecto para decir: "Esto ha sido una maravilla. Muchas gracias a todos, pero se acabó. A veces hay que saber cuándo marcharse de la fiesta". Por lo que a si las Spice Girls vuelven a reunirse para una gira de reencuentro, ella lo más probable es que no esté. Su nueva aspiración y su nuevo camino es la moda, algo que le llamaba desde pequeña.

Vanity Fair ahonda en esta nueva faceta de la 'Spice Pija', donde explica que la afición a la moda, aparte de la que ha tenido por la música, también le viene desde que era una niña: "Siempre me ha encantado la moda. En la década de los ochenta me tumbaba boca abajo en la cama de mi madre, apoyaba la cabeza en las manos y me dedicaba a observar cómo se vestía para salir con mi padre. No solo me encantaban sus prendas, sino también el peinado, el maquillaje, el tiempo que tardaba en arreglarse y cómo sacaba lo mejor de sí misma".

Incluso llevaba los libros es una bolsa de una reconocida marca de moda: "Llevaba los libros en una bolsa de plástico de Gucci, que una de las amigas de mi madre le había dado. Los llevé en ella todos los días hasta que se rompió", afirma para la revista. Creando ahora en la actualidad su propia firma, la mujer de David Beckham declara que lo ha hecho con cabeza y poco a poco, un proyecto que le ha reportado muchas alegrías y escasas pérdidas.

"En ningún momento he dicho: 'Me llamo Victoria Beckham. Voy a extender un cheque, vamos a hacer locuras'. Siempre me he planteado esto de forma muy profesional, y por eso ha funcionado sin sobresaltos", recoge Vanity Fair. "No invertí una cantidad tremenda de dinero", añade.

Finalmente, en lo que respecta a su estancia en España cuando David Beckham jugaba en el Real Madrid, afirma que fue muy buena: "Siempre fueron muy amables y las personas que trabajaban en el Real Madrid también lo fueron", además de que revela que a "David le encanta cómo se juega al fútbol en España".

Por otro lado, ha querido dejar claro que en ningún momento dijo aquella frase a la que le fue atribuida: 'España huele a ajo'. "Jamás diría algo que mostrara tan poco respeto y que, además, no tiene nada que ver con la realidad", afirma con rotundidad Victoria Beckham.