Según explicaron fuentes de la compañía, estaba previsto que este vuelo, el 1131, partiera de Barajas a las 15.30 y fue demorado hasta las 23.00, debido una serie de problemas en las rotaciones de aviones de la aerolínea, que causó una avería en otra aeronave.

El vuelo de Aerolíneas Argentinas que tenía previsto despegar a las 22.00 del viernes de Barajas hacia Buenos Aires fue demorado hasta las 10.00, ya que el avión programado para este vuelo llegó a las 07.00 del sábado a Madrid, tras haber sufrido una avería en la capital argentina.

La compañía decidió entonces utilizar, para que estos pasajeros pudieran efectuar el viaje, el avión programado para la ruta de las 15.30.

Según la aerolínea, los viajeros del vuelo de primera hora de la tarde del sábado fueron trasladados a hoteles para descansar durante la espera, excepto un grupo de unos 40 personas que decidió permanecer en el aeropuerto.

Los pasajeros rellenaron reclamaciones y protagonizaron una protesta en la puerta de embarque que obligó a personarse en el lugar a vigilantes de seguridad del aeropuerto y a agentes de la Guardia Civil.