El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, ha aceptado la dimisión presentada este lunes por Antonio Jesús Mateos como presidente de Manos Unidas por "razones personales", tras lo que se ha procedido a nombrar en su lugar a Joaquín Sainz de la Maza, con "una amplia experiencia de colaboración en la vida parroquial y diocesana"

Según informa el Arzobispado en un comunicado, teniendo en cuenta la proximidad de la campaña anual, que culmina el 9 de febrero, y ante las Navidades, Asenjo, "con el parecer favorable del obispo auxiliar y del Consejo Episcopal", ha decidido nombrar presidente-delegado a Sainz de la Maza.

Así, contará con el apoyo explícito del arzobispo y su consejo, con la colaboración de los socios y voluntarios, para gobernar esta institución católica, erigida y aprobada por la Conferencia Episcopal Española, que "tantos servicios ha prestado en los últimos 53 años a los países del Sur y que goza de una gran estima de la sociedad española y sevillana".

Asenjo, al mismo tiempo, reconoce "con gratitud la dedicación sobresaliente" de Mateos a Manos Unidas y agradece al nuevo presidente su "generosa" aceptación del servicio.

Sainz de la Maza nació en diciembre de 1950, es casado y padre de tres hijos. Licenciado en Derecho, ha dedicado su vida a la empresa privada. Miembro de numerosas Hermandades, ha sido hermano mayor de la Hermandad de Nuestra Señora de la Esperanza Macarena desde mayo de 1993 a noviembre de 2001 y tiene una amplia experiencia de colaboración en la vida parroquial y diocesana.