Decía el filósofo John Stuart Mill que un individuo con una idea vale por noventa y nueve con un solo interés. En tiempos de escasas oportunidades laborales y en un mercado de trabajo tan competitivo como el actual el futuro parece ya destinado a la gente con ideas que destacan por encima del resto.

Los jóvenes murcianos Natalia Sala y Manuel Guerrero, ingenieros informáticos, no sólo han tenido una idea diferente sino que además cuentan con la ilusión y la formación necesarias para confiar en ella y sentirse capaces de desarrollarla con éxito, "además de apoyo familiar claro", admiten.

Su historia les sonará familiar a muchos españoles menores de 30 años con estudios superiores. Casi recién licenciados de 27 y 24 años, aterrizan con ganas en un mercado laboral donde "la informática no está bien pagada". Pese a todo, deciden buscar clientes bajo las piedras en  la localidad murciana de Caravaca de la Cruz, donde ambos viven con sus familias y se dedican de forma autónoma al marketing digital y el posicionamiento SEO.

Sin embargo, explica Natalia, "por vivir en un pueblo casi no tenemos clientes, aquí no se desarrolla a gran escala el tema online y nuestro objetivo es formarnos más e irnos a una gran ciudad para ampliar mercado".

Ante la falta de oportunidades, lo tuvieron bastante claro: especialización. Pero se toparon con una nueva barrera, la económica esta vez.

"Los dos llevábamos un tiempo queriendo hacer un máster para especializarnos en posicionamiento SEO, pero las condiciones económicas no estaban en nuestra mano y se nos ocurrió que quizá alguna empresa querría apostar por nosotros a cambio de trabajo".

Así nació su idea de ofrecerse como fuerza laboral cualificada y especializada en este campo a cambio de que alguna compañía corriese con los 10.000 euros de gastos que suponen los máster que Natalia y Manuel quieren realizar —5.000 euros cada máster—.

El 1 de octubre lanzaron la web del proyecto Págame el Máster y seré tu SEO, un site que según dicen sus jóvenes promotores está teniendo muy buena acogida en las redes sociales y medios digitales. "Varias empresas se han interesado ya por nuestra oferta pero no hay propuesta formal aún. Aún así estamos muy contentos".

Y, ¿por qué pagarles el máster? "Pues porque devolveríamos a la empresa o empresas su inversión en forma de horas de trabajo, la idea es aplicar lo aprendido y nuestra experiencia previa en exclusiva para su proyecto", explican.

Lejos del pesimismo que parece impregnar el mundo laboral en estos días, Natalia y Manuel ven en la crisis un momento de presión ante el que tomar las riendas de su vida profesional.

"Tener cierta necesidad de algo hace que tengas mejores ideas y que te atrevas a llevarlas a cabo. Dentro de lo malo, el país entero está saliendo de la zona de confort, surgen sinergias, se ve más gente joven pensando ideas, mucho networking...".

Sus ganas no les impiden ver las dificultades a las que se enfrentan tratanto de sacar adelante un negocio propio dentro del marketing digital. Son conscientes de que en nuestro país "el tema legal es algo que te echa bastante para atrás a la hora de emprender, la nueva Ley de Emprendedores y autónomos es una ventaja, pero la burocracia todavía es bastante grande".

Sus quejas son un clásico dentro del colectivo que quiere arrancar un negocio: "Buscar financiación es bastante complicado, asumes un alto riesgo y además en España se deja poco margen para fallar, que es lo que a fin de cuentas forma a un emprendedor", su capacidad para el riesgo.