El Roto: "En España somos cobayas de un experimento"

  • 'A cada uno lo suyo' es la tercera crónica de la crisis española del pintor, dibujante e ilustrador Andrés Rábago.
  • La trilogía supone un retrato de la actual coyuntura económica y la crisis de valores centrada en el agotamiento del sistema.
  • El libro dirige sus primeras viñetas contra los políticos y banqueros.
Andrés Rábago, conocido por 'Ops' y 'El Roto', en una foto de archivo.
Andrés Rábago, conocido por 'Ops' y 'El Roto', en una foto de archivo.
Efe
Andrés Rábago, conocido por 'Ops' y 'El Roto', en una foto de archivo.

El dibujante Andrés Rábago, más conocido como 'El Roto', ha presentado A cada uno lo suyo, una nueva antología de sus famosas viñetas en torno a la crisis, en la que se ha mostrado convencido de que España está sirviendo de "laboratorio" y los ciudadanos de "cobayas" de un experimento a gran escala.

En la presentación de su última publicación, Rábago ha expresado su percepción de que España "es un lugar dónde se está llevando a cabo un experimento a gran escala", que antes se intentó hacer en Grecia pero que no sirvió, y ha añadido que "estamos sirviendo de cobayas de algo que, si funciona, se va a implantar en el resto de países".

"Si no, hay cosas que no se entienden", ha subrayado el creador de la popular firma 'El Roto', como "la cerrazón" en insistir en caminos ya explorados por parte de "poderes superiores" y que se ha comprobado que no llevan a ningún sitio.

A cada uno lo suyo es la tercera crónica de la crisis del pintor, dibujante e ilustrador tras Viñetas para una crisis y Camarón que se duerme (se lo lleva la corriente de opinión), y en la misma 'El Roto' hace un retrato de la actual coyuntura económica y la crisis de valores centrada en el agotamiento del sistema actual y sus alternativas.

"Había una vez un buen rey...." cuenta en el libro una madre a su hijo, a lo que éste le responde: "Mami, no me cuentes cuentos; quiero saber la verdad", una crítica a la monarquía que su creador ha recalcado con sus declaraciones, en las que ha señalado que el problema de ésta es que "no se puede modernizar".

"La monarquía es un arcaísmo que funciona por eso; la única solución que tendría sería la decencia, pero eso parece todavía más difícil que la posibilidad de que se modernice", ha dicho, para añadir que es ella misma la que se debe plantear "el dilema" de si es "útil" a la sociedad actual.

Ausencia de líderes reales

Más duro ha sido aún con los "gobernantillos" actuales, quienes ha visto "complicado" que nos saquen de la crisis porque "su torpeza forma parte de su naturaleza", y se ha mostrado convencido de que pasan "por una criba que los hace inútiles para gobernar".

Respecto a la sociedad ha afirmado que no la ve resignada, sino más bien enfadada, "porque el susto es diario en esta trama en la que tienen que estar presentando continuamente escenas terroríficas para que la gente tenga miedo y se mantenga apocada", ha señalado Rábago, quien ha precisado que procura no seguir "la estrategia marcada por el Gobierno" y busca "otros aspectos de la realidad".

En su opinión, no será un cambio político ni la lucha social los factores que lleven "a un nuevo mundo", sino un cambio de mentalidad lo que modifique la realidad; "no podemos seguir confiando en la lucha política o de clases, porque son trazados ya explorados que no llevan a ningún sitio".

Contra los políticos y banqueros dirige las primeras viñetas de su último libro Andrés Rábago, que abre con una persiana negra echada y la inscripción: "Bajaron las persianas y nos dijeron que era de noche...", mientras que en otra sentencia: "Dadnos y se os dará. Evangelio de la corrupción", con una mesa redonda y muchas sillas vacías debajo esperando una supuesta negociación.

Viñetas para repensar la crisis

A pesar de sus ácidas críticas en forma de dibujos, el colaborador diario del diario El País y Premio Nacional de Ilustración asegura que es optimista y que está convencido de que, al final, "la luz prevalece sobre la oscuridad".

"Los que deberían estar pesimistas son los que insisten en que esto es lo que hay: esto no es lo que hay; hay muchas cosas más", ha dicho, para lamentar el "estancamiento" actual y la sensación de que la reconstrucción "llevará mucho tiempo, porque no parece que haya mucha intención de reconstruir".

"¡Tanto luchar para derribar el sistema y al final se cae solo!", dice un antisistema en una de las últimas viñetas del libro, que acaba con un joven que, mochila a la espalda, camina bajo el letrero "Si no podemos cambiar de horizonte, cambiemos de perspectiva".

*Consigue un ejemplar de A cada uno lo suyo en PopularLibros.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento