El volumen de trabajo de la Fiscalía de Cantabria aumentó un 9% el año pasado, cuando se tramitaron un total de 51.363 diligencias, que suponen 4.260 más que en 2011, aunque las sentencias dictadas disminuyeron un 4,5%.

Además, el pasado ejercicio destaca el incremento de delitos contra el patrimonio que, de forma genérica, crecieron un 19%, especialmente los robos con fuerza (un 42%, hasta superar los 6.500) y hurtos y estafas (un 68%, hasta rebasar los 3.300 casos). También llama la atención el aumento "importante" de violencia en el ámbito familiar, de los hijos hacia los padres, con 60 casos, que duplican los 28 registrados en 2011.

Estos y otros datos han sido facilitados este martes por la fiscal superior de Cantabria, María Teresa Calvo, que ha presentado la Memoria de la Fiscalía 2012 a la Comisión de Presidencia y Justicia del Parlamento y que ha subrayado que, por el contrario, descendieron los delitos relacionados con la violencia de género, de hombres a mujeres, con 917 causas y ninguna muerte o violación.