Un total de 18 de las 75 patentes tramitadas por la Universidad de Valladolid (UVA) desde el año 2008 ha sido o está siendo explotado, lo que se traduce en un porcentaje próximo al 18-20 por ciento.

Así lo ha detallado este lunes la responsable de la Oficina para la Transferencia de Resultados de Investigación de la Fundación General de la UVA, Yolanda Calvo, quien, tras matizar que el hecho de que las patentes estén licenciadas a una empresa no significa que estén en el mercado, ha destacado que las patentes presentan una "complejidad legal y técnica" mayor que el software (propiedad intelectual), que es "más inmediata y más fácil".

La Universidad de Valladolid cuenta con un total de 147 patentes nacionales y 38 inscripciones de programas de ordenador en el Registro de la Propiedad Intelectual lo que la sitúa entre las 50 primeras posiciones del ranking de empresas y entidades públicas solitantes de patentes y entre las doce cuando se trata únicamente de universidades, según ha precisado el vicerector de Investigación, José Manuel López.

Estos datos se han difundido con motivo de la presentación de los proyectos ganadores de las becas Prometeo, desarrolladas en el marco del Proyecto de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa de la Junta y que persiguen precisamente implicar a los alumnos universitarios que elaboran trabajos en la dinámica de su protección y puesta en valor y que este año, fruto de una mayor difusión, han llegado a once proyectos (cinco fueron en la pasada convocatoria) de los 20 que se presentaron (fue cerca de una decena el pasado año).

Las becas, dotadas con mil euros en el caso de las patentes y con 500 para la modalidad software, se acompañan de un taller de formación para los beneficiarios en el que, no obstante y según ha recalcado Calvo, se invita a participar incluso a los estudiantes cuya candidatura no fue seleccionada.

Ganadores de la v edición

Ese no ha sido el caso de los once proyectos presentados este lunes, de los que seis son de software (tres del campus de Valladolid, dos de Segovia y uno de Palencia) y cinco patentes (cuatro de Valladolid y una de Palencia).

En concreto y en el caso de los proyectos de software, Juan Francisco Fuentes Pérez consiguió una beca con el proyecto 'Escalas 2012- Software para el cálculo, diseño y sinmulació0n de pasos para peces' que diseña, calcula y simula pasos para peces; Rodrigo Santos Álvarez ha presentado 'ZatDroid. Satellite Tracking and Augmented Reality App for Android', una aplicación "curiosa" que predice la posición de un satélite en tiempo real y su trayectoria futura, y Jesús Peco Abánades y Jorge Cantalejo obtuvieron la beca con 'Girasoft', una aplicación de gestión de incidencias remota de alumnos que las registra en tiempo real.

Adrián González Rodrigo ha presentado una aplicación para Android basada en el modelo de Singapur para aprendizaje y evaluación de Matemáticas, que evita la repetición de contenidos, mejora los resultados y evita los elementos de distracción mientras fomenta los gráficos; Álvaro Serna Cantero ha creado un sistema de producción de hidrógeno en alta mar mediante el uso de la energía de las olas, que tiene su punto fuerte en el aprovechamiento de la energía eólica y marina, y Diego Velasco recibió su beca Prometeo por Psiconnect, una plataforma online que permite comunicar a psiquiatras, cuidadores y pacientes y que permite hacer terapia on-line y seguimiento directo de pacientes psiquiátricos.

En el campo de las patentes, Luis Miguel Sanz y Miriam Rueda han dado a conocer su patente: un nuevo material que mejora los procesos de liberación de hidrógeno; Diego Rodríguez, por su parte, ha creado un sistema de detección, alerta y dispersión de fauna en las proximidades de vías de comunicación y transporte y Alberto Benito ha desarrollado un analizador de tipos de aceite de oliva con un coste cien veces menor al de los equipos actuales.

Por último, Cecilia Cossío y Ana Sánchez han presentado 'Unit', un cubo de ejercicios destinado a la tercera edad que reúne siete módulos para realizar siete prácticas distintas y que tiene un precio de 270 euros mientras que Alberto Díez ha defendido 'DeTapas', un recipiente de plástico integrado por un plato y una pieza soporte que permite transportar de manera conjunta plato y vaso o copa con una única mano y poder así comer con la otra.