El delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Joaquín Bascuñana, ha confirmado que la Policía Nacional y la Guardia Civil están buscando a dos de los cinco delincuentes que la pasada madrugada se enfrentaron en un tiroteo a los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Los otros tres individuos fueron detenidos, y el cabecilla de la banda fue herido por arma de fuego, aunque su estado no reviste gravedad. Los cinco conformaban un grupo delictivo al que se le achacan varios actos de robos desde la primavera de este año,

algunos de ellos con "bastante agresividad" e, incluso, con la utilización de armas de fuego.

Bascuñana ha explicado que estos robos tuvieron lugar en varios lugares de la Región de Murcia, tanto en demarcación de la Guardia Civil como de la Policía Nacional. Al comparar cómo se habían producido los delitos, el Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CICO) comprobó que existía una relación entre los actos denunciados.

A partir de ahí, se inició una investigación conjunta entre ambos cuerpos para seguir a este grupo delictivo. En el marco de este seguimiento, agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional comprobaron la pasada madrugada que los presuntos delincuentes estaban entrando en el recinto de una urbanización en Molina de Segura.

En ese momento, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad se dispusieron a darles el alto, los delincuentes se sorprendieron y huyeron a gran velocidad en un vehículo de gran cilindrada hacia Santomera, alcanzando los 185 kilómetros por hora en su fuga.

Un dispositivo policial estaba preparado en Santomera compuesto por dos coches patrulla, uno de la Policía Nacional y otro de la Guardia Civil, que interceptaron el vehículo huido. Sin embargo, los presuntos delincuentes no atendieron el alto y embistieron con su coche a los agentes.

Como resultado de la embestida, los dos coches patrulla quedaron seriamente dañados, y los cuatro agentes que formaban parte del control, dos policías nacionales y dos guardias civiles, sufrieron distintas heridas como consecuencia del impacto de cristales y con diversos traumatismos, aunque ninguno de ellos está grave.

Cuando los policías se disponían a detener al conductor, observaron que llevaba un arma de fuego, por lo que los agentes se vieron obligados a disparar porque, de lo contrario, habría disparado el propio agresor o delincuente, añade el delegado.

En total, el delincuente que iba armado recibió dos impactos de bala. Una vez detenido, los agentes le identificaron y comprobaron que tenía antecedentes por varios actos de delincuencia "con bastante agresividad", y que estaba buscado por la Policía por quebrantamiento de condena.

Tras el tiroteo, los agentes consiguieron detener a tres de los presuntos delincuentes, entre los que se encuentra el herido, que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente, así como su esposa y un tercer individuo. Así pues, el delegado ha explicado que quedan por detener otras dos personas que están "totalmente identificadas" y, por tanto, confía en que sean arrestadas "en pocas horas".