Técnicos de SEO/BirdLife han capturado y marcado con emisores satélite un nuevo ejemplar de águila calzada en Málaga, así como otros en Huesca, La Rioja, León y Murcia, para conocer al detalle sus movimientos migratorios.

La organización ofrece a través de su aplicación www.migraciondeaves.org poder seguir los movimientos de caza de hasta 60 kilómetros de distancia que realizan las aves en torno a sus nidos y que en septiembre las llevarán a 3.000 kilómetros, hasta diversos países del Sahel.

Con estos nuevos marcajes se pretende aumentar la distribución geográfica de las águilas calzadas marcadas a todo el área de distribución de la especie en España. Ya hay disponible información de 15 águilas calzadas en diez provincias españolas en la página web del proyecto Migra.

Este trabajo se enmarca dentro del programa Migra financiado por la Fundación Iberdrola. El objetivo es llegar a conocer los movimientos, rutas migratorias, áreas de invernada y movimientos dispersivos de todas las especies de aves presentes en España.

Hasta el momento se han marcado casi 200 ejemplares distintos de 18 especies de aves diferentes, acumulando unas 250.000 localizaciones sobre los movimientos de las aves, equipadas con los aparatos más modernos y ligeros de seguimiento.

En el caso del águila calzada, gracias a estas técnicas se empieza a conocer en detalle los movimientos de la especie a lo largo de todo el ciclo anual. Se trata de una información que era prácticamente desconocida hasta el inicio de este programa, explica Javier de la Puente, técnico del Área de Seguimiento de Avifauna de SEO/BirdLife responsable del marcaje de las águilas calzadas.

La organización ha destacado el apoyo de numerosos colaboradores en las diferentes áreas geográficas, que han ayudado en el control de las parejas de águila calzada y en la preparación del trabajo de campo para asegurar el éxito en las tareas de marcaje.

Herramienta "clave"

El programa Migra y su aplicación online www.migraciondeaves.org es una herramienta "clave" para la difusión de los movimientos migratorios de las aves. La ciencia permite que a través de nuevas tecnologías se empleen sistemas de seguimiento mucho más precisos y con más información que el anillamiento.

Los nuevos sistemas de marcaje establecen la localización del ave varias veces al día durante varios años, por lo que permiten conocer cuánto tiempo permanecen exactamente en sus áreas de cría e invernada, cuándo inician su migración, por dónde la realizan, sus velocidades y sus altitudes.

También indican cómo los agentes meteorológicos, el relieve del terreno, los mares o el desierto condicionan sus movimientos y qué puntos y hábitat utilizan para reponer energía en sus migraciones.