El delegado de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, ha defendido la actuación "escrupulosamente transparente" de la Junta de Andalucía en relación al 'caso Bahía Competitiva', subrayando que no ha estado "detrás" en este asunto, sino que fue precisamente quien "descubrió y denunció el fraude".

En declaraciones a los periodistas, López Gil ha recalcado que fue el propio consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Antonio Ávila, y el director general de la Agencia IDEA quienes acudieron "personalmente a denunciar" el caso tras ser alertados de que "las cosas no se estaban haciendo bien" por parte de la responsable provincial de la Agencia IDEA en Cádiz —imputada en el caso—.

Resalta que la Junta, que es otra "afectada" de este fraude y que "nunca puso ni un euro para estas ayudas" y, por tanto, "no hay habido dinero público de la Junta que se haya perdido en este hecho".

Confía en que el asunto "se aclare lo antes posible", ya que, "por desgracia, cuando se manejan tantísimos fondos de ayuda y dinero público, pese a que somos muy rigurosos, siempre ocurren elementos donde hay personas que utilizan cualquier recoveco para aprovecharse".

López Gil defiende que la Junta ha actuado "diligentemente". Asimismo, preguntado por los e-mail que, según el PP, se han revelado en la instrucción del caso que apuntarían al Consejo de Gobierno de la Junta y al consejero Ávila, dice que "hasta donde conoce" es justo "todo lo contrario". Se muestra "convencido" de que el consejero fue "escrupuloso" en este hecho e insiste en que la Junta trató de que "todo se hiciera conforme a la valoración objetiva que se establecía".

Además, recalca que, tras la alerta de la gerente provincial de IDEA, fue Ávila quien acudió a la Policía, lo cual considera "una garantía suficiente". Finalmente, enfatiza que la Junta "no denunció cuando otros descubrieron, sino que fue "la que descubrió y denunció" estos hechos.