Existen autopistas que recorren el Mediterráneo: son las Autopistas del Mar y transportan ya, cada año, a más de 390.000 pasajeros  y 3,1 millones de toneladas desde Barcelona hacia otras ciudades, italianas en su mayoría pero también del norte de África. Con la reciente inauguración del muelle Costa y de la nueva terminal Grimaldi, el Port de Barcelona hace un paso más y apuesta por estas vías.

Desde 2000 hasta 2012, los pasajeros transportados por el Short Sea Shipping (SSS) desde o hacia Barcelona, se han multiplicado por cinco y llegaron ya a las 390.256 personas. Estas rutas sirven también para trasladar vehículos que transportan mercancías, liberando las autopistas de tierra.

El año pasado se trasladaron 92.185 UTI, es decir, camiones, plataformas, remolques y demás. Se trata de una cifra que casi triplica la de 2000.

Las terminales de SSS (Acciona y Grimaldi) están conectadas con ferrocarril. Han liberado unos 100.000 camiones del tráfico rodado al año, lo que ha permitido reducir emisiones contaminantes.

Tras la inauguración del muelle Costa y de la nueva terminal Grimaldi, que ha supuesto una inversión de 20 millones de euros por parte del Port y de 20 millones más por parte de Grimaldi, queda pendiente ahora la urbanización de su entorno. Se creará un bulevar para acceder a la instalación sin entrar en el área restringida del Port. Está previsto que se inaugure de cara al verano de 2014.