Sereno, cansado y con los pies en el suelo. Así se mostró Juan Manuel, el día después de ganar la primer edición del talent show MasterChef. "Llevo una mañana de teléfonos que es increíble", aseguraba este miércoles el joven cocinero de Albox (Almería), que tuvo que abandonar sus estudios de hostelería al morir su padre. Ahora sus planes más inmediatos son publicar su libro de recetas, comenzar su curso en la academia Cordon Bleu en octubre y después incorporarse al puesto de trabajo que le han ofrecido en una cadena de restaurantes, aunque aún tendrá que elegir destino.

Asegura estar muy sorprendido del éxito del programa, que barrió en audiencia en su final, la noche del martes: consiguió un 33,1% de cuota de pantalla y 5,5 millones de espectadores de media. También consiguió el minuto de oro de la jornada, con  6.629.000 espectadores y un 47.6% de share.

¿Cómo está viviendo este triunfo de MasterChef?

Estoy hecho polvo, entre unas cosas y otras acabamos a las 4 de la mañana y a las 8 y cuarto ya tenía la primera rueda de prensa. Y me queda todo el día por delante.

¿Ha podido dormir algo?

He dormido 3 horas, y entre el calor que hace, lo poco que he dormido y las pasadas que me estoy pegando, voy listo. Pero merece la pena, se hace todo el esfuerzo que haga falta.

Con sinceridad: ¿imaginaba que podría ser ganador?

No me lo esperaba para nada, desde el inicio del programa me quedé anonadado de ver el gran nivel que había en la cocina respecto a mis compañeros, y no me esperaba que fuera a llegar a esto. Intenté refinarme un poco y aceptar las críticas, y eso me ha hecho evolucionar y cambiar.

En el momento en el que dijeron su nombre como ganador, ¿qué le pasó por la cabeza?

No tengo palabras para definirlo, estoy muy contento, muy satisfecho con el trabajo que he hecho, y como siempre digo, este es solo el inicio de una etapa. Hay que seguir luchando y trabajar muy duro.

El martes por la noche siguió la emisión de la final desde los cine Kinépolis, donde los concursantes tuvieron un recibimiento multitudinario. ¿Era la primera vez que tomaba contacto con la realidad?

No me esperaba que hubiera tanta gente, me siento muy agradecido por su apoyo y su cariño. Hasta ahora estabamos totalmente aislados, no recibíamos mensajes ni nada, solo nos permitían llamar por teléfono 10 minutos a la semana, y cuando hablábamos con los familiares no podíamos mencionar nada del 'tema'. Desconocía totalmente lo que estaba pasando en el exterior.

¿No sabía si el programa tenía éxito o no?

No, pero fuimos notando algo con la reacción de los propios miembros del equipo. En el segundo o el tercer programa se notaba que todo estaba más vivo, que había más ilusión en la gente que trabajaba en el programa. Aunque no nos dijeran nada, eso se trasmite, se percibe.

¿Siente alguna clase de temor o vértigo por lo que se avecina ahora o lo que puede cambiar su vida?

No tengo temor, voy a seguir siendo la misma persona, no voy a cambiar para nada. Estoy deseando ir a trabajar porque la situación actualmente está muy jodida.

¿Dejará entonces de lado su trabajo como camarero?

La verdad es que llevaba cerca de año y medio que casi no trabajaba, cogía lo que me salía. Y ahora se me abren muchas puertas, así que estoy muy contento.

Imagino que en esos momentos de triunfo habrá tenido muy presente a su padre...

Ha estado presente en todo momento, cuando he evolucionado, cuando han venido los grandes chefs a probar mis platos; era la persona que me iba a pagar los estudios de hostelería pero desgraciadamente no pudo ser. Y he tenido la suerte de tener otra oportunidad.

¿Veía 'Operación Triunfo'? ¿Cómo se pasa de ver un 'reality' desde fuera a estar ahí dentro?

Sí, vi dos ediciones. Desde dentro lo ves como una cosa normal, tienes al jurado y a los cámaras y con el paso del tiempo le vas tomando cariño y es como si fuesen parte de tu familia. Lo sorprendente es que hace tres meses estabas en casa y salías a la calle como una persona normal y corriente. Te meten en un programa de la tele, sigues siendo una persona normal y corriente, y cuando sales piensas: "Bah, no me va a conocer nadie". Pero claro empieza a venir uno y el otro, y el otro. Al principio me agobié pero la verdad es que he sabido asimilarlo y doy las gracias a la gente por el apoyo que he tenido.

¿Cree que se convertirá en un nuevo Bisbal?

No, no. Sinceramente no me considero un nuevo Bisbal, soy una persona trabajadora y luchadora y voy a seguir siendo la misma persona. Todo el que se me acerque le voy a tratar como siempre.

Las recetas del libro que le van a publicar, ¿son todas suyas o le han asesorado?

No, es totalmente mío. Creo que saldrá en unas dos semanas, el tiempo que hemos estado en el programa fuimos haciendo nuestro libro de recetas.

¿Y qué vamos a encontrar en ese libro?

De todo, recetas de tipo tradicional, cocina más elegante, va a ver entrantes, primeros platos, segundos platos, postres...

¿Quién considera que es el gran Master Chef a nivel mundial?

Sin lugar a duda, Ferran Adrià, aunque respetando todo, a mí me gusta la cocina tradicional de mi zona. Pero sé que aunque haga cosas creativas también le gusta la cocina tradicional y si viniera a comer a mi casa le haría algo de mi tierra.

¿En casa cuál es su plato favorito?

Las lentejas y la zarzuela de marisco, la misma que preparé en la semifinal.

¿Y qué plato le prepararía a Rajoy?

Buf, ahora mismo me pillas superbloqueado, no te sabría decir.