Detenidos dos jóvenes por robos con violencia a ancianas en el ascensor de sus domicilios

Una de las víctimas sufrió días después un 'ictus'

La Policía Nacional detuvo el pasado día 20 a dos jóvenes de 18 y 21 años, RJ.V.B. y JC.B.B., compatriotas y con el mismo domicilio en Santander, como presuntos autores de sendos robos con violencia a dos mujeres de avanzada edad en el ascensor de sus viviendas, en las calles General Moscardó y Marqués de la Hermida de la capital cántabra.

Aunque en las dos ocasiones actuaron en compañía de otros jóvenes, las victimas identificaron solo a uno de ellos en cada caso. A los detenidos les constaban cuatro y dos detenciones anteriores, respectivamente y pasaron a disposición judicial, han informado este lunes fuentes policiales.

El primer robo ocurrió a las 22 horas del pasado 8 de mayo en la calle General Moscardó, cuando la victima, una octogenaria entraba en el portal de su domicilio, y tres jóvenes entraron con ella. Ya en el ascensor, la taparon la boca y le arrebataron tres cadenas de oro con cuatro colgantes también de oro, que llevaba.

La mujer denunció los hechos y aportó la señas físicas de uno de los jóvenes, que resultó ser RJ.V.B, y que fue detenido por la Policía Judicial el pasado día 20 por un delito de robo con violencia.

La víctima, que resultó con erosiones en la cara y en el cuello, sufrió un ictus unos días después, por el que estuvo ingresada dos días en el hospital.

El otro robo tuvo lugar en la calle Marqués de la Hermida el 24 de mayo, a las 20.45 horas, con un 'modus operandi' casi idéntico al anterior. Dos jóvenes abordaron a la victima, otra octogenaria, y sujetándola por el cuello la arrebataron un collar con un colgante, ambos de oro.

También en este caso la victima aportó la descripción de uno de los jóvenes, lo que llevo a la Policía Judicial, a la identificación y detención de JC.B.B el día 20 por otro delito de robo con violencia.

La Policía ha advertido que los portales de los inmuebles son uno de los espacios en los que se suele producir un mayor número de robos con violencia, de los que son víctimas fundamentalmente, las personas de edad avanzada.

Para mejorar la seguridad en estos lugares, pide que se sigan unas pautas básicas de seguridad, como no abrir el portal a desconocidos que llamen al portero automático con cualquier pretexto (reparto de propaganda, visitas, etc.) y, al llegar al portal, fijarse en las personas que puedan estar en actitud vigilante o que se aproximen con intención de entrar.

Además, recomienda llevar la llave preparada con tiempo y entrar en el portal sin franquear el paso a desconocidos. En el caso de que un desconocido logre acceder, habrá que salir de nuevo a la calle.

También recomienda no compartir el ascensor con desconocidos, no portar joyas ni otros objetos de valor a la vista y, en caso de sufrir un robo, no oponer resistencia, sino tratar de memorizar la mayor cantidad de rasgos físicos del ladrón y llamar inmediatamente a la Policía, al 091.

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