La Guardia Civil de Melilla ha intervenido 66 kilogramos de droga, tipo hachís, en cinco actuaciones distintas. Cuatro de ellas se han llevado a cabo en los controles a los vehículos previos a su embarque en los buques rumbo a la Península. La otra, a una mujer joven que embarcaba a pie y la llevaba "enfajada al cuerpo" bajo la ropa que vestía.

Según ha informado el Instituto Armado en nota de prensa, de todas estas actuaciones destaca la ocurrida el día 21, al constatar el perro detector la posible presencia de estupefaciente oculto en una furgoneta marca Ford, de matricula nacional y ocupada por su conductor, cuyo equipaje daba "apariencia de normalidad". La droga iba oculta a lo largo de las barras transversales del techo, que tuvo que ser desmontado para llegar hasta ella. La droga iba distribuida en 104 paquetes de diferentes tamaños y colores.

En otra, llevada a cabo el jueves 20, la droga se localizó en el interior de un turismo marca Seat, modelo Ibiza y matrícula nacional, ocupado por tres personas. Para llegar al interior de las vigas que corren a lo largo del chasis, lugar donde se ocultaba la droga, los agentes de la Guardia Civil tuvieron que desmontar previamente el paragolpes trasero. En el interior se encontraron 85 botellas envasadas al vacío con un peso total superior a los siete kilogramos.

La única intervención con pasajeros se materializó este sábado, con la ayuda de la vigilante de seguridad encargada de la manipulación del scanner que apreció "cierto nerviosismo" en una mujer muy joven en el momento de pasar el arco. Tras su reconocimiento superficial en lugar habilitado, se le localizaron diez pastillas adosadas al cuerpo "enfajadas bajo la ropa" que vestía, con un peso de unos 900 gramos. La detenida, de 19 años y nacionalidad española, es natural y vecina de Melilla.

En total han sido detenidas ocho personas que han sido puestas a disposición judicial como supuestos autores de un delito contra la salud pública, junto a la droga intervenida en las siete actuaciones y los coches utilizados como instrumentos para la comisión de delitos.