El presidente de Sniace, Blas Mezquita, ha considerado este jueves que aún "hay margen de maniobra" para, con el trabajo de todos (empresa, comité y Gobierno), conseguir "aminorar el impacto" del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción, que afectará a 364 trabajadores de la fábrica de Torrelavega, el 67% de la plantilla.

Así lo ha manifestado Mezquita que, a preguntas de la prensa tras mantener una reunión de casi una hora y media con el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha opinado que, aunque "la situación es complicada", se pueden encontrar "vías y mecanismos" para que el ERE, que ha asegurado que desde el punto de vista legal "no ha quedado otro remedio" que plantear, afecte "lo menos posible".

Mezquita ha indicado que Diego le ha mostrado su "preocupación" por la situación de la planta y le ha solicitado cierta información, que él se ha comprometido a hacérsela llegar "cuanto antes". Además, en el encuentro, ambos han abordado las "posibilidades de continuar o no" con el trabajo conjunto que empresa y Ejecutivo han realizado en los últimos meses.

En este sentido, cuestionado sobre la advertencia de Diego de que daría marcha atrás con los beneficios conseguidos para Sniace en caso de que no se replantee el ERE, Mezquita ha señalado que el presidente ha hecho "su análisis" y ha planteado lo que ha considerado "oportuno".

Si bien, ha indicado que lo que va a hacer la empresa, durante el mes de consultas que ha abierto y que coincide con el ERE temporal vigente, es "seguir trabajando" para que el "impacto" sea "el menor posible" y, para ello, Sniace va a "redoblar si cabe los esfuerzos" para poder "conseguir que todo se vaya encauzando y aclarando".

"Creo que el objetivo es que, en estos 30 días, entre todos seamos capaces de buscar alternativas y soluciones al tema; y no es un tema sencillo, no es un tema fácil, pero yo quiero seguir teniendo el optimismo de que entre todos seremos capaces de encontrar mecanismos para aminorar y que el impacto de la medida sea el menor posible".