El vicesecretario de Comunicación del PP provincial de Cáceres, José Manuel García Ballestero, considera que el PSOE no apoya la futura Ley de reforma de la administración local porque con la nueva norma, que entrará próximamente en vía parlamentaria, "se acabará con el clientelismo político, los chanchullos y los enredos" en los ayuntamientos y "eso es lo que verdaderamente le preocupa a los socialistas".

Así lo ha señalado García Ballestero en una rueda de prensa en la sede provincial del PP en la que ha pedido a los socialistas que se sumen al debate y hagan propuestas al texto en lugar de "chantajear" a las instituciones como la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) de la que el secretario provincial del PSOE, Miguel Ángel Morales, ha anunciado que se irán si prospera la ley.

"Que dejen de enredar y se sumen al debate y a realizar propuestas firmes en lugar de buscar excusas para engañar a los ciudadanos escondiendo su incompetencia", ha subrayado, al tiempo que insiste en que la nueva ley "no privatizará ningún servicio municipal, ni destruirá empleo".

García Ballestero ha defendido la reforma en marcha porque cree que "es muy necesaria" y que busca ahondar en la transparencia en los municipios, acabar con las duplicidades de servicios, mejorar la financiación y garantizar el control financiero y presupuestario, por lo que asegura que "no hay ninguna razón por la que el PSOE no quiera participar en su elaboración".

En su intervención ha recordado que además el texto puede modificarse en su tramitación parlamentaria y de hecho, ya se han recogido algunas propuestas realizadas desde la Fempex, como la remuneración a alcaldes de municipios con menos de 1.000 habitantes, el consejo de alcaldes para debatir de forma común, o la limitación de la intervención de municipios, entre otras cuestiones.

"La administración local actualmente es insostenible y es una pena que alguien esté haciendo bandera política de este asunto, por lo que pido al PSOE que vuelva al debate y al consenso y presente propuestas al texto", recalca García Balletero, que insiste en que la ley busca que la administración local "no sea inviable, lenta poco eficaz y muy cara".