Agentes de la Policía Nacional de Cáceres han desarticulado en la capital cacereña a un grupo organizado dedicado al tráfico de drogas y al blanqueo de capitales, dentro de la operación denominada 'Pardillo', en la que han sido detenidas 12 personas, nueve de ellas miembros de una misma familia, de las que cuatro han ingresado en prisión.

Entre los detenidos, con edades comprendidas entre los 22 y los 50 años, hay cuatro mujeres y todos formaban parte de una red de distribución de venta de droga al menudeo a los que se les imputan presuntos delitos contra la salud pública, blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal, falsificación de moneda, delitos contra las personas y contra la seguridad del tráfico, ya que algunas de las detenciones se produjeron tras una persecución policial en coche.

Los detalles de esta operación, que ha sido bautizada con el apodo de uno de los integrantes de la banda, han sido dados a conocer este jueves por el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, y el comisario provincial de Cáceres, Luis Ochagavía, quien ha señalado que la investigación comenzó hace un año con la detención de una persona en el aeropuerto de Barajas (Madrid) a la que se le incautaron 2,3 kilos de cocaína ocultos en el fondo de una maleta.

Posteriormente se desmanteló, en noviembre del año pasado, un laboratorio para la elaboración de sustancias estupefacientes en el barrio cacereño de La Mejostilla que dio como resultado la detención de otras tres personas que ya han sido condenadas a penas de cárcel de entre dos y cuatro años.

Desde entonces, se vigiló a otros individuos relacionados con ellos, los cuales no desarrollaban ningún trabajo remunerado, incluso alguno estaba cobrando la prestación por desempleo y, sin embargo, según ha explicado el comisario, "llevaban un alto tren de vida", disponiendo de varios chalets unifamiliares, "muy cerca de la Comisaría", vehículos de alta gama y compras y gastos que "no se correspondían con su estatus social".

Estas personas, la mayoría con antecedentes penales y conocidos delincuentes, fueron poco a poco identificadas al igual que la función que cada una desempeñada dentro del grupo, liderado por el "cabecilla" que era el que cerraba los negocios, compraba la mercancía e impartía las órdenes a seguir para la venta de droga no solo en Cáceres capital, sino también en la provincia, y el blanqueo de dinero con la compra de propiedades y artículos de lujo.

Propiedades por valor de un millón de euros

En el curso de las investigaciones se ha comprobado que el grupo disponía de dos viviendas y un chalet en el centro de la ciudad, un apartamento en Almería, 14 parcelas en la comarca de La Vera, en el norte de Cáceres, y una finca de unas cinco hectáreas en la zona del Pradillo de la capital cacereña, la cual cuenta con dos casas en su interior y una piscina de grandes dimensiones.

Además tenían en su poder más de diez vehículos de alta gama, varias motocicletas tipo KTM, dos coches históricos totalmente restaurados (un Mini y un Seat 600), y una moto de agua; todo ello adquirido con el dinero obtenido por la venta de droga y cuyo valor supera el millón de euros, según un primer cálculo realizado por la policía.

En los registros de los domicilios se han incautado 20 gramos de cocaína, 30 plantas de marihuana, 150 gramos de marihuana en cogollos, 150 gramos de hachís en bellotas, 16 kilos de sustancias para cortar la droga, así como 10.000 euros en efectivo y otros objetos como 27 teléfonos móviles, 13 televisores de grandes dimensiones, nueve ordenadores portátiles, tres armas cortas simuladas, una escopeta de casa y hasta una placa falsa del Cuerpo Nacional de Policía.

Las detenciones se produjeron entre los pasados días 29 y 30 de mayo, en plena celebración de las Ferias de San Fernando de Cáceres, y

cuatro de los doce detenidos ya han ingresado en prisión.

El delegado del Gobierno, que ha estado acompañado por la subdelegada en Cáceres, Jerónima Sayagués, y el jefe superior de la Policía Nacional, Miguel García-Izquierdo, han felicitado a la quincena de agentes de la Brigada de Estupefacientes y del Grupo Operativo de Respuesta que han participado en la operación por su "buen trabajo y diligencia".