El proyecto Micosylva+, el Centro de Servicios y Promoción Forestal y de Industria de Castilla y León (Cesefor), el Instituto Federal de Investigación Forestal del Gobierno de Suiza (WSL) y la empresa Arotz Food —que cuenta con la mayor plantación trufera del mundo— colaborarán en un proyecto para analizar el impacto del cambio climático en la truficultura.

En virtud de este acuerdo, Arotz cede una red de parcelas para realizar estudios y, además, colaborará en la toma de datos, según han informado a Europa Press fuentes de la iniciativa.

El inicio de esta colaboración se materializó con la firma del acuerdo durante la celebración del segundo seminario científico-técnico de Micosylva+. Los análisis y elaboración de resultados contarán con financiación del WSL de Suiza, bajo la dirección de los investigadores Simón Egli, Andreas Rigling, Ulf Büntgen, y de Fernando Martínez-Peña, por parte de la Fundación Cesefor, quien ha avanzado que, en el futuro, "está previsto aumentar la red de parcelas de investigación de truficultura a otras plantaciones truferas de la región, para lo que se establecerán acuerdos con sus propietarios".

Micosylva+ cuenta con el respaldo y financiación del Comité de Programación del Programa Europeo de Cooperación Territorial Interreg

Ivb sudoe. Los cinco socios del proyecto son la Fundación Cesefor, el Centre Tecnològic Forestal de Catalunya, la Union Grand Sud des Communes Forestières (Francia), la Chambre d'Agriculture de la Dordogne (Francia) y el Agrupamento Europeu de Cooperaçao Territorial Zasnet (Portugal).