Si las estrellas cinematográficas acuden a Cannes para promocionarse a sí mismas y a sus proyectos, ¿qué mejor lugar para presentar un documental que en tono irónico y satírico lamente la aparente supremacía de las celebridades sobre los contenidos?

Con las fiestas, los lanzamientos y los paparazzis ya en marcha en el mercado mundial de estrenos de cine, el director James Toback mostró Seducido y abandonado, la historia de cómo el actor Alec Baldwin y él hablaron con directores, inversores y dueños de estudios en el festival de Cannes del año pasado tratando de conseguir financiación para una película sin estrellas de primer nivel.

Ellos nunca planearon hacer la película, pero su posiblemente rentable guión sobre un espía y un periodista en Irak acabó siendo rechazado por la ausencia de grandes nombres.

Baldwin fue descartado por ser un mero actor de televisión, mientras que la actriz femenina, la canadiense Neve Campbell, estrella de las películas de Scream, fue rechazada por tener poco tirón en taquilla. "El dinero sigue a las estrellas", dice Toback en el documental, que ha sido adquirido por el canal HBO de Time Warner.

Además de ser el principal escaparate mundial del cine, Cannes reúne a más de 40.000 profesionales que compran y venden películas o buscan financiación para proyectos. Muchos de ellos no ven las películas.

Un inversor asegura a Toback que él ni siquiera lee los guiones, decide si apoya o no los proyectos dependiendo de las estrellas que actúen, dado que el marketing de una película es ahora más importante que su contenido.

No sorprende, entonces, que las tareas de Leonardo DiCaprio, Justin Timberlake y Emma Watson no se limiten a promocionar películas ya terminadas que se muestran durante los doce días del festival de Cannes, sino también aprovechar su condición de estrellas para ensalzar sus nuevos proyectos y buscar distribuidores.

Pero Baldwin y Toback no son los únicos que han tomado a las celebridades y a los gajes de su oficio como tema de análisis.

La antigua estrella de Los vigilantes de la playa, David Hasselhoff, de 60 años, fue al festival con su novia de 32 años Hayley Robert para promocionar Killing Hasselhoff, su todavía no estrenada película sobre un hombre que contrata a un sicario para matar a una celebridad —el propio Hasselhoff— para ganar dinero en una apuesta.

Paris Hilton, siempre dispuesta a aparecer en público, acudió a una fiesta por la película The Bling Ring, de Sofia Coppola, estrenada en Cannes, en la que ella hace un cameo. Una banda de ladrones adolescentes obsesionados con las celebridades irrumpen en las casas de sus ídolos, incluida la de Hilton.

DiCaprio y el director Martin Scorsese anunciaron su próximo film conjunto, Silence, mientras Justin Timberlake y su mujer Jessica Biel organizaron una fiesta de temática de discoteca para compradores de Spining Gold, su planeada película biográfica del ejecutivo discográfico Neil Bogart.

Jennifer Lawrence, que ganó el Oscar de este año a la mejor actriz, estuvo trabajando mucho junto al actor australiano Liam Hemsworth para promocionar la segunda y tercera parte de Juegos del hambre, que llegarán a los cines en septiembre.

La estrella de Kung Fu, Jackie Chan, apareció con la estrella de la gran pantalla china Fan Bingbing para hablar de Skiptrace, su comedia de acción para el año que viene.

Además, las actrices Liv Tyler, Jane Fonda y Eva Longoria, las modelos Cindy Crawford y Cara Delevingne y el cantante de pop y DJ Boy George estuvieron en las fiestas de Cannes para hablar de sus proyectos o simplemente haciendo gala de su condición de estrellas para ejercer de "embajadores de marca".

Más allá de promocionar sus películas y carreras, Cannes ofrece algunas oportunidades para que estrellas puedan actuar de manera altruista.

Sharon Stone, Jessica Chastain y Janet Jackson participarán el próximo jueves en la gala anual de amfAR para recaudar fondos para la investigación sobre el SIDA. Shirley Bassey y Duran Duran también acudirán a la cita.