El consejero de Educación del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Serna, ha afirmado que el anteproyecto de ley orgánica de mejora de la calidad de la educación (LOMCE), que este viernes será aprobado por el Consejo de Ministros para su posterior remisión a las Cortes, no supone "un giro de 180 grados" sino "un ligero cambio de rumbo".
Serna ha puntualizado que la LOMCE "no pasa página" sino que es una reforma, una "corrección de rumbo" a su entender "necesaria y urgente" ante los resultados del sistema educativo español, que están -ha dicho- "muy por debajo de la media europea" en términos de fracaso escolar, tasa de repetición y pruebas de evaluación interna, a pesar de que el gasto por alumno está "por encima de la media".
En su opinión, los cambios que introduce la LOMCE en aspectos como los itinerarios formativos y la evaluación externa son "muy positivos" y van a permitir al sistema educativo ganar en eficiencia.
Asimismo, ha afirmado que a lo largo de los próximos meses habrá una "explicación detenida" a la comunidad educativa y a la sociedad en su conjunto. "Después de todo el diálogo que ha habido con los comunidades autónomas y los agentes sociales, estoy seguro de que van a recibir esta reforma con muy buena perspectiva", ha concluido.
El consejero de Educación, Cultura y Deporte ha realizado estas afirmaciones durante una rueda de prensa en el Palacio de Festivales, convocada para presentar la tarjeta familiar multiacceso a los museos de Cantabria.
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