Así reza en la pregunta, a la que ha tenido acceso Europa Press, suscrita por la parlamentaria popular María Francisca Carazo, todo ello después de que el Pleno del Consejo Escolar de Andalucía haya aprobado, con el voto en contra sindical, el informe del proyecto de decreto que regula la formación inicial y permanente del profesorado, que tramita la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía y que incluiría al personal de administración y servicios (PAS) y no únicamente a los recursos humanos docentes, según han confirmado a Europa Press fuentes sindicales.

De esta manera, la administración autonómica habría accedido a una petición sindical elevada al respecto, siendo ésta, según las fuentes consultadas, la única modificación con cierta enjundia realizada tras el proceso de alegación iniciado entre las centrales con representación en la Mesa Sectorial de Educación.

Con motivo de la tramitación de la iniciativa, pendiente ahora de su aprobación, el presidente de la Sección de Enseñanza de CSI-F en Andalucía, Francisco Hidalgo, ya subrayó a Europa Press que en el principal "caballo de batalla", el horario de aplicación, "no hay sintonía", puesto que "la administración plantea horarios laborales o de permanencia y no vemos en éstos los huecos para poder hacerlo".

Así, es una postura generalizada la de advertir del riesgo de "sobresaturación" de los profesores al asumir más tareas de las que ya les corresponden en horario lectivo. El secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO-A, José Blanco, remarcó de su lado a Europa Press que, al respecto, la posición sindical defiende que la formación del profesorado debe acometerse durante la permanencia del profesional en su centro de trabajo, si bien "con el aumento de horas lectivas y con toda la gestión inherente a los centros queda muy poca disponibilidad".

"Cada vez hay menos tiempo, y hay que ver cómo se puede garantizar la función docente", indicó Blanco, apuntando a la efectuación de "ajustes" para que los enseñantes puedan disponer de tiempo para la formación, concepto que debe ser "voluntario" y no, en cambio, una "sobrecarga".

Hidalgo también incide en el "adelgazamiento" de los órganos de asesoría y en que se profundice más en la acreditación de los centros, criterio en el que la Junta "sí se ha mostrado más flexible".

De su lado, Blanco ha manifestado que, a su juicio, "no queda claramente recogida la voluntariedad del profesorado", aunque se congratula de que "finalmente sí se vayan a tener en cuenta puntos como la demanda de centros y la formación curricular e individual".