La secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún, ha lamentado que en los últimos años se hayan perdido, además de "derechos" y "condiciones" laborales, "ánimo, ilusión y esperanza", también en las formaciones sindicales, y que, a su juicio, son elementos "claves" para la salir de la crisis actual.

Así, tras destacar que los sindicalistas "somos gente animosa", la líder de UGT ha comentado que "antes se oía a alguien cantar por los pasillos", pero "hace ya unos cuantos años que no se oye a nadie".

En este sentido, y en una entrevista concedida a RNE, en la que participó Europa Press, Cedrún ha indicado que ahora "todo lo que llega al sindicato es malo", ya que prácticamente toda su labor tiene que ver con indemnizaciones por despidos, rebaja de condiciones laborales o pérdida permanente de puestos de trabajo, de modo que tienen que "convivir" con la "tristeza".

Así, y tras confesar que tener que afrontar el despido de personas dentro del propio sindicato "han sido los momentos más duros de mi vida", Cedrún ha señalado que prácticamente no tienen "ninguna posibilidad" de indicar a la gente que se acerca a UGT en qué empresas pueden dejar su currículum porque estén ampliando plantillas, por ejemplo.

Con todo ello, Cedrún ha admitido que "no hay mucho espacio para la esperanza individual", pero sí para la "colectiva", ya que a su entender "con trabajo, esfuerzo y lucha" se consiguen las cosas. "Hay lugar para la esperanza, pero no para que nos caiga el maná del cielo", ha apostillado.

No sabemos cómo salir de la crisis

De todos modos, ha apuntado que la crisis actual ha sido diferente a las anteriores, puesto que además de venir "de fuera" se ha visto agravada por la situación del modelo productivo. Así, mientras en el pasado "nos sacó la construcción", en la actualidad "no sabemos cómo salir de la crisis", al no haber "tejido productivo que aguante" o "empresas capaces de sostener la situación". "Tentemos problemas estructurales de nuestra economía gravísimos", ha advertido la sindicalista, para diferenciar la crisis española de la de otros países como Italia o Francia.

Después de aludir a la "falta de perspectiva" o "mediocridad" de España para "no ver cuál era el mejor diseño económico" y tratar de que el crecimiento fuera "lento" y "sostenido" en vez de "tan rápido", Cedrún ha apostado por reforzar a la pequeña industria y mejorar su eficiencia económica, para que sean capaces de organizarse y acudir a los mercados "en las mismas condiciones" que las grandes empresas, y facilitarles también la inversión y acceso a la investigación y la innovación.

Relaciones laborales y organización sindical

Sobre las relaciones laborales, la secretaria general de UGT en Cantabria cree que han "ido para atrás de manera radical" en los últimos años.

Tras repasar la organización de su sindicato en federaciones por sectores, ha apuntado que ahora la realidad laboral es "absolutamente diferente", ya que las empresas son cada vez más pequeñas, los trabajadores están "más dispersos" y, por tanto, las relaciones laborales están "más individualizadas".

Así, no es "fácil" llegar "de una sola vez" a un número "importante" de trabajadores, sino que "hay que dividirse mucho", y adoptar decisiones de forma "ágil y rápida", extremo que "dificulta" una estructura "tan grande".

También ha censurado la "campaña de desprestigio" hacia los sindicatos, en la que, a sus ojos, "estaba todo planificado" y Cedrún no cree, por tanto, que sea algo "inocente", más en un momento en que hay mucha información y la gente se queda "en los titulares". Igualmente, ha criticado a los gobiernos, que han tomado decisiones "desconociendo la realidad", "de oreja" y, además, "haciendo daño a los sindicatos".

A pesar de todo, Cedrún ha abogado por aprovechar los recursos, buscar mejores maneras de organizarse y llegar mejor a los trabajadores. A este respecto, y tras once años al frente de UGT, ha reiterado que concurrirá a su reelección al frente del sindicato en el 12º Congreso Regional para afrontar su cuarto mandato dispuesta a afrontar retos "externos e internos", luchando para recuperar la situación económica y el deterioro social, mejorar las condiciones de vida y trabajo y lograr una organización sindical "más ágil". "Sería el colmo de la ilusión", ha concluido.