La Coordinadora Andaluza de Organizaciones No Gubernamentales para el Desarrollo (Caongd) "respalda completamente" el decreto ley contra la exclusión social que ha anunciado el Gobierno andaluz, porque "es una paso más en una dirección de política económica que marca un camino alternativo diferente al que se está escuchando en el resto de los territorios y desde el Gobierno central".

Así, su presidente, José María Ruibérriz, afirma que este decreto "cuestiona el discurso de que no hay alternativas", y en este sentido, como coordinadora de ONG y como colectivo social "estamos profundamente preocupados" con la situación de pobreza y de exclusión social y desigualdad en el mundo, pero también en España y Andalucía, por lo que "no podemos hacer otra cosa que respaldar la medida".

Asimismo, Ruibérriz, en declaraciones a Europa Press, ha señalado que este decreto, sumado al decreto de vivienda social y, por otra parte, al anuncio de la reforma del tramo autonómico del IRPF "son medidas que van en la dirección correcta", y, además, "son el reflejo del espíritu solidario de la sociedad andaluza".

Sobre la solidaridad alimentaria, uno de los ejes de este decreto, y cuyo objetivo que todos los niños en Andalucía hagan, al menos, tres comidas al día, el presidente de la Caongd opina que "es una demostración de que se trata de un problema con un dimensión global fruto de políticas globales que son profundamente injustas con los más vulnerables de la sociedad".

En este sentido, aboga por la "defensa" de las políticas públicas y la cooperación al desarrollo como "elemento fundamental de estas políticas que tienden a corregir esas desigualdades del sistema". "Cuando desde los gobiernos en España se cuestiona la utilidad de la cooperación al desarrollo, lo que podemos ver es que no es más que otro instrumento que tiene la sociedad para combatir la desigualdad", destaca, toda vez que asegura que "combatirla fuera es también hacerlo dentro de Andalucía".

"No nos sorprende que ese nivel de deterioro de la sociedad haya llegado ya a nuestro territorio y la única manera de corregirlo es cambiando en su conjunto las políticas que sustentan a una sociedad más justa y más solidaria: la dependencia, la sanidad, la educación pública o la cooperación al desarrollo; todas son patas de una mesa que de otra manera no se sostiene", concluye Ruibérriz.