La Guardia Civil ha detenido a una joven, de 30 años y nacionalidad española, acusada presuntamente de sustraer dinero en efectivo a personas mayores, a las que distraía fingiendo recoger firmas para la construcción de un asilo.

Hasta el momento se le atribuye la autoría de seis hechos delictivos que superan los 3.000 euros, si bien no se descarta su implicación en otros delitos que aún no hayan sido denunciados.

Las actuaciones, que se enmarcan en la operación 'Asilo', tuvieron su inicio después de que la Benemérita abriera una investigación para esclarecer varios hurtos perpetrados a personas de edad avanzada en las inmediaciones de entidades bancarias de Águilas, unos hechos que 'a priori' presentaban la misma forma de comisión.

La autora de estas sustracciones de efectivo era una mujer joven que actuaba en las inmediaciones de sucursales bancarias ubicadas en una de las principales avenidas de Águilas, donde existe una mayor concentración de este tipo de establecimientos.

Con una apariencia "normal, bien vestida, amable y sonriente", según las manifestaciones de las víctimas, la mujer, para disipar sospechas, se mezclaba entre otros clientes de las oficinas mientras elegía sus futuras víctimas, siempre personas de edad avanzada que solían realizar considerables reintegros de efectivo, generalmente, a principios de mes.

Una vez seleccionada su próxima víctima, en función de la cantidad reintegrada, la abordaba a la salida de la sucursal, en plena calle, y absorbía toda su atención con una gran amabilidad y un argumento sensible: la iniciativa de recogida de firmas para apoyar la futura construcción de una residencia para la 3ª edad y otros servicios de tipo humanitario dirigidos al colectivo de mayores de la localidad.

Para dar más veracidad, iba dotada con todos los útiles precisos para estos menesteres, como carpeta, formularios de recogida de datos, solicitud de DNI. Era en ese momento cuando aprovechaba la poca destreza de estas personas para manipular sus efectos personales, ofreciéndose a ayudarles para maniobrar con su documentación y, con gran habilidad, les arrebataba el dinero retirado sin levantar sospechas.

Tras varios meses de investigación, con el apoyo de la Policía Local de Águilas y la propia colaboración ciudadana, se ha identificado a la timadora ahora detenida, que había causado gran alarma social entre este sector de la sociedad aguileña y sus familiares, sobre todo por lo perfeccionado del método empleado y la destreza con la que llevaba a cabo sus acciones.

Una vez identificada plenamente, la arrestada fue reconocida por sus víctimas como presunta autora de delito continuado de hurto. A.B.C.G., vecina de Águilas, posee antecedentes por la comisión de hechos delictivos similares. Junto con las diligencias instruidas, ha sido puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de Lorca.