Más de 103.000 personas depositan 53.000 ramos en los dos días de Ofrenda a la 'Mare de Déu'

Un total de 103.122 falleros y falleras han depositado 53.014 ramos y 158 canastillas a los pies de la 'Mare de Déu' en la tradicional Ofrenda de Flores a la Virgen de los Desamparados, que se ha desarrollado durante las tardes de este domingo y lunes, dentro del programa fallero.
Ofrenda a la Virgen
Ofrenda a la Virgen
VICTOR GUTIERREZ NAVARRO/AVAN
Ofrenda a la Virgen

Un total de 103.122 falleros y falleras han depositado 53.014 ramos y 158 canastillas a los pies de la 'Mare de Déu' en la tradicional Ofrenda de Flores a la Virgen de los Desamparados, que se ha desarrollado durante las tardes de este domingo y lunes, dentro del programa fallero.

Según los datos totales facilitados por la Junta Central Fallera (JCF), en la Ofrenda de 2013 han participado 386 fallas, con 35.213 falleras; 27.033 falleros; 17.811 falleritas y 13.895 falleritos durante los dos días en los que se ha cubierto de flores a la Virgen y la Plaza de la Mare de Déu. Durante estas jornadas, 9.200 músicos han acompañados a las comisiones falleras en su recorrido.

La Fallera Mayor Infantil de Valencia, Carla González, cerró la ofrenda del domingo mientras que la Fallera Mayor, Begoña Jiménez, fue la última en pasar ante la Virgen en estas Fallas 2013.

El diseño del manto que ha vestido en esta ocasión la Virgen de los Desamparados se titula 'Vistiendo a mi reina', a cargo de Marisol Burgos. Ha contado además con la colaboración técnica de Josete Santaeulalia y su composición ha dispuesto de la coordinación de Pepe García y Miguel Galán. Un total de 38 vestidores han sido los encargados de la composición de este manto, que ya luce en la Plaza de la Virgen y da color a la patrona.

HISTORIA

La Ofrenda a la Virgen de los Desamparados se inició hacia 1942, desde un modesto taller de carpintería de la barriada de Russafa que realizaba la construcción de unos travesaños de madera para que sirvieran de apoyo a los primeros ramos de flor que se le ofrecían a la Virgen.

Posteriormente, en la fachada de la Real Basílica y para los días de la ofrenda, se instalaba un cuadro de azulejos con la imagen de nuestra Patrona, y alrededor de él se colocaban los ramos de flor en el enrejado de madera preparado al efecto por la familia Llorca, iniciadora de la tradición. Dicho cuadro de azulejos se puede contemplar hoy en día en la fachada de la Basílica recayente a la calle de La Leña.

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