La subdelegada del Gobierno en Cáceres, Jerónima Sayagués, ha alertado de que la siembra del tomate se está "retrasando de momento" a causa de las lluvias caídas en los últimos días en Extremadura.

Sayagués ha explicado que "el problema mayor" que se tiene actualmente es el referido a la siembra del tomate" que, al parecer, se está "retrasando de momento".

La subdelegada ha apostillado que Miajadas (Cáceres) es uno de los pueblos donde más tomate se cultiva y ha añadido que "de momento" las aguas están retrasando su siembra, aunque para otros productos y determinados árboles frutales "viene muy bien".

De esta forma ha respondido, a preguntas de los periodistas sobre la situación de los pantanos extremeños, en una rueda de prensa en la que el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, junto con la subdelegada en Badajoz, Pilar Nogales, ha dado a conocer el reparto en Extremadura de los fondos del Acuerdo para el Empleo y la Protección Social Agrario (Aepsa).

Nivel de los embalses

López Iglesias ha afirmado sobre los embalses de la región que su nivel "va subiendo día a día" a causa de las últimas lluvias y ha puesto como ejemplo que hace una semana los de la cuenca del río Guadiana estaban en torno al 77 por ciento y este martes al 83.

Ha agregado que los "pantanos más grandes" están "muy llenos", como el Cíjara que está al 72 por ciento, el García Sola al 81 por ciento, el de Orellana al 87 por ciento o el de La Serena al 85 por ciento, mientras que "muchos" de "los chiquititos" están llenos y algunos están desembalsando agua, como es el caso del Guadiloba.

Así, ha dicho que la "media" de la cuenca del Guadiana está al 83 por ciento y la del Tajo al 63 por ciento, ante lo cual ha expuesto que "está lloviendo bastante menos en la parte norte que en la parte sur" de la comunidad extremeña "cuando ha sido siempre al contrario".

Preguntado por si se plantean actuaciones si las lluvias persisten en la región, López Iglesias ha expuesto que los grandes pantanos "están tan controlados" que cuando llegan a un porcentaje de capacidad "empiezan a soltar agua y no tienen problemas", aunque dichos desembalses "pueden inundar algunos cultivos y algunas cosas, pero poco más".

En este sentido, ha recalcado que el Tajo y el Guadiana son de los ríos "más controlados que tiene España".