Kutxabank cerró el ejercicio 2012 con un beneficio neto consolidado de 84,6 millones de euros, un 65% inferior a la obtenida en 2011 por las tres cajas vascas que integran el Grupo, tras dotar 585 millones de euros para la provisión de riesgos generales y deterioro de activos.

El presidente de la entidad, Mario Fernández, ha explicado que la cuenta de resultados se ha cerrado "con una extremada prudencia" tras un 2012 "dramático" y ante las "incertidumbres" que subsisten en 2013 tanto desde el punto de vista del negocio como regulatorio. De este modo, las dotaciones para provisiones suponen un crecimiento del 21,2 por ciento respecto a las "ya muy prudentes coberturas" realizadas en diciembre de 2011, hasta los 585 millones.

Una vez efectuadas, el beneficio neto consolidado del Grupo se situó en 84,6 millones. CajaSur contribuyó al balance de resultados con una aportación de 4,8 millones de euros, un 69 por ciento más que en el ejercicio precedente.

Según ha indicado la entidad, "los fuertes requisitos de capitalización y de provisiones, unidos al estancamiento en niveles históricamente mínimos de los tipos de interés, al estrechamiento de los márgenes de negocio y a la reducción de la actividad económica, explicarían el descenso del 65,5 por ciento en la generación de beneficios del Grupo, con respecto a 2011". Si bien su presidente, ha precisado que 2012 es el primer año de la entidad y, por tanto, no se dispone de "ningún tipo de balance consolidado en términos análogos" que permita comparación.

Destaca el "buen comportamiento" de los márgenes financieros y ordinarios que constituyen el negocio típico bancario, al situarse "por encima, incluso, de las previsiones marcadas por la propia entidad, tanto en el epígrafe de ingresos como de gastos".

El Grupo incrementó el saneamiento de sus activos, que alcanzaron un total 66.707 millones de euros, y su patrimonio neto del Grupo Kutxabank ascendió a 4.829 millones de euros. Su 'Core Tier I' se situó en el 10,1 por ciento y con un coeficiente de solvencia del 10,8 por ciento.

El índice de morosidad del Grupo fue del 9,57 por ciento, aunque excluyendo a CajaSur, la tasa se reduce al 6,11 por ciento, más de cuatro puntos por debajo de la media del sistema. La tasa global de cobertura alcanzó el 73,22 por ciento y las provisiones de activos adjudicados se situaron en el 45,6 por ciento.

El margen de intereses creció un 13,3 por ciento gracias a la gestión de la estructura de balance y a la evolución a la baja de los tipos de interés. La revisión de precios de la cartera de créditos, sobre todo los préstamos hipotecarios, motivó, sin embargo, que a finales de 2012 los márgenes se vieran "paulatinamente deteriorados", tendencia que prevé continuará en este año.

La cartera de participadas disminuyó su aportación, tanto por dividendos (un 9,3% menos) como por las entidades valoradas por el método de la participación. Los resultados por operaciones financieras correspondieron básicamente a compraventas de títulos de renta fija. Con todo ello, el margen bruto alcanzó los 1.531 millones de euros, en niveles similares a los de 2011.

Con una caída de los gastos de explotación del 7 por ciento, los gastos de personal descendieron un 3,4 por ciento, los gastos de administración un 11,4 por ciento y la amortización el 17,1 por ciento. El índice de eficiencia se situó en el 56,2 por ciento, con una mejora de tres puntos porcentuales con respecto a 2011.

De este modo, el margen de explotación alcanzó los 671 millones de euros con un crecimiento del 6,6 por ciento respecto al generado en el ejercicio anterior.

El volumen de negocio alcanzó los 114.694 millones de euros. Los recursos gestionados de clientes ascendieron a 62.360 millones de euros, con una reducción del 6,1 por ciento, "afectados por la evolución del mercado mayorista y de capitales". Por el contrario, las redes de negocio minoristas aumentaron sus recursos un 0,9 por ciento, con un crecimiento del 7,4 por ciento en los fondos de inversión y 8,4 por ciento de los planes de pensiones.

La inversión crediticia neta de Kutxabank experimentó una caída del 6,1 por ciento, hasta llegar a los 48.881 millones de euros, y la reducción del crédito a la clientela bruto se situó en el 6,6 por ciento. A pesar de esta caída, el Grupo mantiene una cuota de penetración del 37 por ciento en la contratación de hipotecas con particulares.

Obra social

Las obras sociales de BBK, Vital y Kutxa recibieron el pasado diciembre un dividendo de 27,9 millones de euros, una dotación conjunta que supera el compromiso adquirido en el contrato de integración de destinar a las Obras Sociales el 30 por ciento del resultado anual de Kutxabank. En concreto el porcentaje alcanza el 34 por ciento.

Además, según ha anunciado Fernández, el Consejo de Administración ha acordado proponer a la Junta General la autorización para poder disponer en 2013 de un dividendo complementario, que podría llegar a alcanzar la cuantía del dividendo ya entregado a cuenta, en función de la evolución del presente ejercicio, y que se destinaría a proyectos sociales de carácter extraordinario.

La entidad participó con 120 millones en el Sareb (25% en capital y 75% en bonos subordinados) y con 150 viviendas al Fondo Social de Vivienda. Además, el pasado mes de enero, "colocó" 750 millones de euros en cédulas hipotecarias, el total de las previstas, con un 80 por ciento de demandantes extranjeros.

El proceso de integración de las tres cajas vascas en Kutxabank ha completado en febrero la incorporación de la red de Vital en la plataforma tecnológica de Kutxabank y se prevé realizar este mes de marzo la convergencia de Kutxa.

"el derecho a decidir"

Fernández ha destacado que, a pesar de la difícil coyuntura, se ha logrado conservar "la independencia del banco" y se han cubierto "el 100% de las exigencias" establecidas sin acudir a ayudas públicas. En esta línea, ha situado como "primer objetivo" conservar "el derecho a decidir", para lo que es necesario mantenerse dentro de los límites fijados para el sistema financiero mundial.

"Cuando no tengamos el coeficiente de solvencia, nos invaden", ha advertido el presidente de Kutxabank, que ha lamentado que "las primas de riesgo se han convertido en la práctica en la mayor ayuda de Estado".

Asimismo, ha anunciado que, aunque cree necesario tener "mayor tamaño, en el entorno de los ciento y pico mil millones", Kutxabank no tiene "la menor intención de hacer ningún tipo de operación" a lo largo de 2013 y "en 2014 hablaremos".

En este sentido, ha rechazado las informaciones que apuntaban a que "estábamos interesados en el Banco Galego" y ha reiterado que su papel en Cataluña Caixa se limita a "conocer" y no se ha realizado ninguna oferta ni se hará "salvo un cambio total de circunstancias".

Asimismo, Fernández, que ha señalado que la participación en Iberdrola es "estratégica", ha advertido de que es preciso "reducir drásticamente" la cartera de participadas "de acuerdo con las reglas internacionales", por lo que "la tendencia es a una cartera simbólica".

RETRIBUCIONES

Los consejeros de Kutxabank percibieron el año pasado unas retribuciones de 1,4 millones de euros. Para 2013, el Consejo de Administración ha aprobado una congelación del primer nivel de equipo directivo y una reducción del 10 por ciento en la del presidente, con lo que pasa a recibir 463.500 euros, sin retribución variable.

Además, se ha establecido un plan de retribución variable, que no incluye a ningún miembro del Consejo, basado en "términos objetivos", según ha precisado Mario Fernández.