El Plan de Control Tributario de la Junta hará seguimiento a contribuyentes con depósitos en entidades del extranjero

El Plan de Control Tributario para 2013 de la Consejería de Hacienda y Administración Pública prevé, entre otros objetivos, dentro del Impuesto sobre Patrimonio, hacer un especial seguimiento a contribuyentes que tengan depósitos y activos financieros en entidades bancarias situadas fuera del territorio nacional así como bienes inmuebles situados fuera de España.

Según la resolución de la Dirección de la Agencia Tributaria de Andalucía, con las directrices generales del citado plan, publicada esta semana en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), la principal función del Plan de Control Tributario consiste en "determinar y definir aquellas áreas de riesgo en las que se debe actuar para prevenir y combatir el fraude fiscal".

Este plan se enmarca en la elaboración por parte de la Agencia Tributaria andaluza del Plan de lucha contra el fraude fiscal, con vigencia desde octubre de 2012 a marzo de 2014; y en la necesidad de coordinar actuaciones, mediante el intercambios de información entre las administraciones tributarias autonómicas y estatal y fijando una planificación coordinada de las actuaciones desarrolladas.

En ese sentido, este plan de control de 2013 prevé seguir con el convenio entre la Agencia estatal y la Agencia andaluza, pero también se pretende ampliar en el ámbito y número de datos intercambiados así como a la profundización de la explotación de dicha información.

Este plan de control para 2013 prioriza el control de los impuestos cuya gestión le corresponde a la Junta —Impuesto de Patrimonio, Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones—, el control de los beneficios fiscales y la mejora de la recaudación; e intensificar el control de recaudación de los ingresos de derecho público derivados de la gestión para la comunidad autónoma del conjunto de las consejerías y agencias dependientes, "con especial atención a los reintegros de subvenciones y a la realización de los ingresos derivados de los procedimientos sancionadores por incumplimiento de la normativa sectorial".

Según el plan, en materia de gestión tributaria, las actuaciones de control tienen carácter extensivo y su finalidad es, básicamente, el control de la presentación de las autoliquidaciones, y la comprobación de las declaraciones presentadas. En este sentido, las áreas de actuación son los tributos cedidos y propios gestionados por la Agencia.

Transacciones con oro

Con respecto al Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, además de controlará la presentación de autoliquidaciones, se revisarán los expedientes donde se aplicó el gravamen reducido correspondiente a adquisiciones de viviendas por parte de inmobiliarias para su reventa posterior en condiciones legalmente establecidas o por menores de 35 años o discapacitados.

Entre otras cuestiones, se hará un seguimiento de las transacciones comerciales con oro y embarcaciones de recreo para comprobar y en su caso liquidar el impuesto en la modalidad transmisiones onerosas.

En relación con los impuestos ecológicos, además de comprobar las autoliquidaciones, se controlará la aplicación de los beneficios fiscales, por inversiones de carácter medioambiental, mediante el apoyo recibido de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.

En el Impuesto sobre Depósitos de Clientes de Entidades Bancarias, las actuaciones de control se centrarán la comprobación de la base imponible declarada por cada entidad y la procedencia de los beneficios fiscales aplicados en los ejercicios de vigencia.

Inspección tributaria

En materia de inspección tributaria, donde se aplica un control intensivo, se pretende corregir los incumplimientos tributarios realizados y prevenir que se puedan producir en el futuro.

El plan resalta la importancia de la "visibilidad" del control, "trasladando a los ciudadanos la certeza de que existe una elevada probabilidad de que los comportamientos fraudulentos sean rápida y severamente corregidos", para lo cual se pretende "acercar el control al momento de la realización del hecho imponible, lo que presupone que en el primer cuatrimestre de 2013 deberán ser finalizados al menos el 20 por ciento de los expedientes pendientes con mayor antigüedad; ejecutando campañas simultáneas de control sobre determinadas operaciones con especial relevancia en los operadores económicos; y realizando líneas innovadoras de control fiscal".

Para el año 2013, las áreas de actuación prioritarias en el ámbito del control intensivo, serán "la detección de hechos no declarados; la imposición patrimonial, en su doble vertiente de adquisiciones y tenencia de un patrimonio; el control del sector inmobiliario; y el control de la correcta aplicación de determinados beneficios fiscales alegados por contribuyentes y del cumplimiento de requisitos".

Se continuará dedicando especial atención a la llamada 'simulación de precios', en las adquisiciones inmobiliarias, puestas de manifiesto entre otros casos por la circulación de billetes de alta denominación.

En concreto, en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones se dedicará especial atención a ciertos supuestos, de forma que "se considerará de investigación preferente aquellas herencias en las que se detecten bienes y derechos que se hayan omitido la masa hereditaria; o la detección de posible deslocalizaciones de este impuesto, en especial por cambios 'ficticios' del domicilio fiscal a otras comunidades".

En el Impuesto sobre el Patrimonio, las actuaciones se centrarán en investigar a aquellos contribuyentes que se encuentren en circunstancias como aquellos que "tenían depósitos y activos financieros en entidades bancarias situadas fuera del territorio nacional así como bienes inmuebles situados fuera de España", se investigarán a los que teniendo la obligación de declarar el impuesto sobre el patrimonio, no lo han hecho.

En cuanto a otros impuestos, se investigará la correcta aplicación de exenciones en determinadas operaciones. En los impuestos ecológicos, se controlará en los impuestos sobre vertidos a las aguas litorales y en el de emisiones de gases a la atmósfera, la correcta aplicación de las deducciones por inversiones medioambientales, así como el mantenimiento de la inversión. En el canon de mejora, se investigarán posibles fraudes, en coordinación con la Consejería competente.

Control de recaudación

En materia de control de la recaudación, las áreas de actuación se extenderán a todos los tributos, propios y cedidos, y los demás ingresos de derecho público, si bien también se implicarán de modo más intenso en el control de recaudación del conjunto de las consejerías y agencias dependientes.

Se efectuará un control singularizado de todas aquellas deudas cuyo importe total pendiente de cobro supere la cifra de 30.000 euros, con independencia de la situación en que se encuentren.

Los programas en que se desarrollará el plan parcial de recaudación con carácter prioritario serán procedimientos de compensación de oficio; agilización de los aplazamientos y fraccionamientos; un seguimiento especial de los derechos de mayor cuantía, para agilizar su cobro en el más breve plazo posible; y se pretende conseguir el reintegro de subvenciones y a la realización de los ingresos derivados de los procedimientos sancionadores por incumplimientos de la normativa sectorial.

Además, los órganos de recaudación desarrollarán actuaciones como coordinación de la actividad recaudatoria; programa, análisis y control de la situación de la deuda; control de procedimientos concursales; tercerías de dominio; o procedimientos sancionadores, entre ellos, se impulsarán actuaciones de embargo de bienes y derechos, principalmente embargo de devoluciones tributarias, así como ejecución de avales depositados en garantía del cobro de deudas.