La constructora andaluza Detea ha negado este sábado que tuviera intención de demoler los edificios que adquirió al Ayuntamiento en las Isla de la Cartuja, así como ha considerado que el Consistorio sevillano ha evidenciado "su responsabilidad directa" en el expolio que sufrieron los mencionados inmuebles el pasado mes de junio tras las declaraciones que realizó este viernes el delegado de Seguridad y Movilidad, Demetrio Cabello, en las que aseveró que los propios servicios municipales desmantelaron numerosos materiales y equipos "superficiales" de los dos edificios al considerar que había "indicios" de que la "intención" de Detea era demolerlos.

En un comunicado, Detea, en la misma línea, ha negando que trasladara ese mensaje de presunto derribo a representante alguno del Ayuntamiento, "en ningún momento y de ninguna forma". Es más, afirma que, "nunca, nadie del Ayuntamiento se ha dirigido a nosotros, ni oficial ni extraoficialmente, para preguntarnos sobre nuestra intención de uso de esos inmuebles".

Y es que, según argumenta la constructora, un equipo de la compañía visitó las instalaciones el pasado 25 de mayo con la intención conocer su estado para "trasladar su sede a dichos edificios, así como dedicarlos a alquiler".

Así, Detea ha mostrado su "estupor por la frivolidad" con la que un representante del Ayuntamiento "ha especulado sobre nuestras intenciones de uso de los edificios adquiridos en la isla de la Cartuja, aludiendo a unos supuestos indicios sobre los que no ha aportado prueba ni documentación alguna". En este sentido, considera "gravísimas" las declaraciones efectuadas por el delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla, unas afirmaciones que, a su entender, "evidencian la responsabilidad directa del Ayuntamiento en los hechos".

En este punto, la compañía andaluza considera que esas manifestaciones públicas "dejan patentes y agravan si cabe más la responsabilidad del Ayuntamiento en el expolio y desmantelamiento de unas propiedades por la que Detea pagó más de 25 millones de euros".

Por último, Detea ha dicho sentirse "francamente desconcertada" por el modo en que el Ayuntamiento está llevando este asunto, "con pronunciamientos públicos a cual más desafortunado y alejado de la realidad, y sobre todo sin voluntad alguna de sentarse a negociar, en contra de las declaraciones efectuadas en su momento por el alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido".

Los hechos

Entretanto cabe recordar que los edificios en cuestión fueron adquiridos por Detea al Ayuntamiento el 29 de diciembre de 2009 dentro de un lote de tres inmuebles situados en la avenida de Américo Vespucio, en la isla de la Cartuja. Tras la compra, el Ayuntamiento entregó a la constructora el primer edificio en 2011 y la empresa procedió después a su demolición, toda vez que los dos edificios restante albergaron las instalaciones de la Policía Local hasta principios del pasado mes de junio.

Según la cronología de los hechos, el 25 de mayo, el personal de Detea visitó las instalaciones de los dos edificios pendientes de entrega y días después, el 15 de junio, fue firmada la entrega de las instalaciones por parte del Ayuntamiento, que ya entonces había evacuado las dependencias de la Policía Local. El 19 de junio, los responsables de Detea advirtieron del elevado estado de deterioro de los inmuebles entregados, que según refleja un informe derivado de una inspección posterior, había sufrido el "desmantelamiento" de su equipamiento e instalaciones, así como numerosos desperfectos y destrozos en su interior. Detea, de cualquier modo, elevó los hechos a la Policía Nacional el 20 de junio de 2012.

"DESVALIJAMIENTO"

Pues bien, a petición del Grupo socialista, el delegado municipal de Seguridad y Movilidad compareció este viernes, en el seno del pleno ordinario celebrado por el Ayuntamiento, para responder a las numerosas preguntas formuladas por el portavoz socialista, Juan Espadas, a cuenta de este "desvalijamiento". En su comparecencia, Demetrio Cabello ha defendido insistentemente que Detea "mostró su conformidad con el acta de entrega" de los dos últimos edificios el pasado mes de junio "sin hacer observaciones".

Igualmente, ha detallado que por parte de la Policía Local y de operarios del servicio municipal de Edificios Municipales, fueron "retirados" o desmantelados de los dos inmuebles, previamente a su entrega, materiales como "once equipos de aire acondicionado, taquillas, pantallas empotradas, interruptores, diferenciales, mangueras, hilo de línea, tubos fluorescentes, cuadros eléctricos, placas de escayola, dos fuentes de agua, cuatro lavabos, etcétera...", toda vez que estos elementos fueron reutilizados en otras dependencias municipales o almacenados, según Cabello.