Agentes de la Policía Nacional han detenido a cinco hombres de nacionalidad china, de entre 32 y 55 años, que presuntamente tuvieron retenido a un compatriota suyo durante tres días amenazándole con provocarle daños a él y su familia por una supuesta deuda que tenía contraída con ellos. La deuda era de 3.000 euros pero, al aplicarle unos intereses del 100 por cien, ascendía a 6.000 euros, según ha informado la Jefatura Superior en un comunicado.

A los presuntos autores de los hechos se le imputan los delitos de detención ilegal y amenazas. Los hechos ocurrieron el lunes, cuando los policías tuvieron conocimiento, a través de una llamada telefónica recibida en la sala del 091, de que en una sucursal bancaria del distrito de Abastos de Valencia se encontraba una persona retirando dinero de su cuenta presuntamente obligado por un tercero.

Rápidamente se presentó en el lugar una patrulla de la Policía Nacional, que supo que, momentos antes, un hombre acompañado por otro, los dos de origen chino, había intentado sacar dinero. Los agentes localizaron a la supuesta víctima cerca del lugar, que les comunicó que le estaban exigiendo sacar dinero de su cuenta, así como, que a lo largo de tres días, desde el 18 de enero, había sido retenido en contra de su voluntad en un piso, donde le habían arrebatado su documentación, golpeado y amenazado, como consecuencia de de haber contraído una deuda de 3.000 euros.

Ahora le exigían la devolución del dinero prestado con unos intereses del 100 por cien. Los agentes, ante la gravedad de los hechos, arrestaron al hombre que se encontraba acompañando a la víctima por un presunto delito de detención ilegal y amenazas. A continuación, establecieron un dispositivo de vigilancia y control en torno al domicilio donde supuestamente había estado retenido.

Uno quince minutos más tarde, los agentes localizaron a cuatro hombres de origen chino, que tras realizar las averiguaciones oportunas, fueron arrestados por los presuntos delitos de detención ilegal y amenazas. Posteriormente, los investigadores realizaron un registro en el domicilio donde localizaron una maleta con ropa y un ordenador propiedad de la víctima, así como el pasaporte a su nombre.

Según las investigaciones, la víctima habría aceptado un préstamo de 3.000 euros, que supuestamente destinó a jugar en el casino. Al no devolverlo en tres días con los intereses correspondientes, sus compatriotas le retuvieron en contra de su voluntad. De los cinco detenidos, tres con antecedentes policiales, cuatro pasaron a disposición judicial, mientras que el otro fue puesto en libertad.