El rector de la Universidad de Sevilla (US), Antonio Ramírez de Arellano, ha participado esta semana en una reunión mantenida con la secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, Marta Fernández, a la que se ha solicitado un plan específico de tesorería para las universidades que permita aliviar la "asfixia" económica de la institución. Ha apuntado en este sentido que pese al cumplimiento del objetivo de déficit concretado en el caso de la Hispalense la sede académica sigue sufriendo una losa que se define, sobre todo, en el "injustificable" pago a proveedores, la afección a los empleados y el hecho de tener los programas de investigación "casi paralizados".

Ello, junto a la petición de que el plan económico respete "lo máximo posible" la financiación operativa de la universidad, es la principal reclamación dada a conocer por Ramírez de Arellano, respecto a la situación económica y financiera de la US, durante la presentación en Claustro de su informe de gobierno del ejercicio 2011-2012, expuesto este miércoles y que ya puede ser sometido a votación por los claustrales hasta la tarde del próximo viernes 25 de enero.

En éste, el rector de la Hispalense, que ha tenido un recuerdo previo a la memoria del catedrático de Derecho Internacional Público Juan Antonio Carrillo Salcedo, ha realizado un repaso por el devenir de la institución a lo largo de la pasada campaña, incidiendo en la tesitura de financiación de la universidad como uno de los puntos principales que ha marcado la trayectoria de la US.

Así, ha recordado que, frente al compromiso de la Junta de llegar al 1,05 por ciento de financiación en 2011, éste ha empeorado al pasar al 1,02 por ciento, bajando una centésima en relación al ejercicio anterior. "La crisis, contra lo que dicen algunos, afectan a la universidad", ha resumido, abundando en que el objetivo de financiación pública está "lejos" de cumplirse; prueba de ello es el paso de 86 millones de saldo inicial a 9 de final. No obstante, Ramírez de Arellano ha recordado que hasta ahora la US se puede sostener de manera "solvente" gracias a la buena gestión de años anteriores.

UNOS 150

Afectados por el "bloqueo" de plazas

El otro gran punto de la sesión, cuyos matices han suscitado la inmensa mayoría de las intervenciones en el Claustro, ha sido la política de recursos humanos, nuclearmente afectada por las medidas de "restricción" del Gobierno central, que han creado una situación "compleja". Así, ha incidido en la importante bajada del número de profesores —unos 200, según confirmó a Europa Press el propio Ramírez de Arellano—, con un aumento del número de grados y la impartición de más de 700.000 horas de clase, incluyendo un incremento del tiempo de docencia sin subida de masa salarial.

Según ha reivindicado el rector, las medidas de austeridad deben ser compatibles con el desarrollo con medios "suficientes" del trabajo de los empleados de la universidad, dándose la circunstancia de que hay cada vez más profesores acreditados para los que no se han podido convocar concursos por las medidas de "ambas" administraciones, ya que el punto clave es "decidir" la aplicación de la tasa de reposición del 10 por ciento.

Y es que estas plazas están "bloqueadas" al suspenderse los concursos, viéndose afectados casi 150 profesionales por esta situación. De hecho, el Ejecutivo central decidió impugnar judicialmente las convocatorias de muchas universidades, lo que, para el rector de la US, podría introducir un elemento adicional de complejidad al darse la complejidad de múltiples fallos judiciales diferentes. El caso de los ayudantes doctores es distinto: al ser personal laboral, se encontraban en una tesitura de incertidumbre por la finalización de sus contratos cuya resolución depende de la Junta, aunque por ahora se ha salvado la situación al adscribirlos como interinos.

Supresión del complemento de jubilación

Otro aspecto a tener en cuenta es el de la supresión del complemento económico de jubilación en orden a una mayor seguridad jurídica, ya que el Tribunal de Cuentas instruye diligencias sobre esta práctica, si bien Ramírez de Arellano ha subrayado que en tres sedes universitarias ya hay constancia de un posible archivo de las actuaciones.

Durante su turno de palabra, la mayoría de los claustrales han expuesto sus dudas sobre aspectos tales como el complemento de jubilación, la vinculación de sexenios a la carga docente, la aplicación de la tasa de reposición o la incidencia del Plan de Investigación en determinadas áreas, si bien prácticamente todos han coincidido en agradecer al rector su labor de representación de la comunidad universitaria a la hora de oponerse a las medidas gubernamentales y realizar una continua defensa de la universidad pública.

Algunos, como Juan José Iglesias (Historia) o Jesús García (Psicología) han realizado una encendida alabanza de la gestión de Ramírez de Arellano, mientras que otros, como José Pérez de Lama (Arquitectura) o Víctor Molina (Química), aún reconociendo su actuación, han sido más críticos, instándole a dar "un paso más".

La dación de cuentas de los endurecimientos de los requisitos para matrículas —lo que no ha tenido especial incidencia en el número de inscritos— y becas, la aseveración de que las obras de infraestructura estarán sujetas a la disponibilidad de tesorería o el desarrollo del II Plan de Docencia, cuyos términos serán objeto de otra sesión de Claustro, han sido otros de los aspectos repasados por el rector en su informe.